Descargar en PDF - BIBLIOTECA DIGITAL | Universidad del ...
Descargar en PDF - BIBLIOTECA DIGITAL | Universidad del ...
Descargar en PDF - BIBLIOTECA DIGITAL | Universidad del ...
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
90<br />
como soy?” Yo he sido muy exig<strong>en</strong>te conmigo mismo.<br />
–Uno de los problemas que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> los Down es que la sociedad suele tratarlos<br />
como niños. Esa lucha para crecer, a veces debe hacerse contra la propia<br />
familia.<br />
–Por ejemplo, mi físico es el mismo de hace años, no veo cambios <strong>en</strong> mí.<br />
Cuando me preguntan cuántos años t<strong>en</strong>go y digo 29, me dic<strong>en</strong> que no los<br />
apar<strong>en</strong>to. Eso me molesta. Sé que es por el físico, pero no me gusta que me<br />
trat<strong>en</strong> como a un niño; pero es muy difícil. Es verdad que la g<strong>en</strong>te pi<strong>en</strong>sa que<br />
eres un niño siempre.<br />
–Quizás a algunos discapacitados los atrapa eso. Prefier<strong>en</strong> no crecer, como<br />
muchos otros niños, y ser Peter Pan para no <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>tarse con un mundo que<br />
supon<strong>en</strong> hostil.<br />
–A mí no me pasó. Cuando t<strong>en</strong>ía 14 o 15 años era tanta mi propia autoestima<br />
que todo el lado conmiserativo no me gustaba nada. Quería salir de eso,<br />
demostrar quién era y lo que podía hacer.<br />
–En realidad, su vida debe ser difícil, necesita ser un bu<strong>en</strong> guerrero para<br />
llevarla.<br />
–Sí que es duro, más que nada porque siempre ti<strong>en</strong>es que estar demostrando<br />
que puedes. Que puedes hacer esto o lo otro, que puedes viajar. Es muy<br />
cansador, te hartas. A veces pi<strong>en</strong>sas que los prejuicios han disminuido, pero es<br />
que están más soterrados. En el ingreso hubo un acto de fin de curso. Todos<br />
los premios se los llevaron las chicas, m<strong>en</strong>os dos que fueron para otro chico y<br />
para mí. Al final, el director dijo: “Y ahora os voy a hablar de un chico que todos<br />
conocéis, que ha hecho un gran esfuerzo, pero a qui<strong>en</strong> no se le ha regalado<br />
nada. Ese chico es Pablo Pineda”. En cuanto dijo mi nombre, el salón de actos<br />
se puso <strong>en</strong> pie a aplaudir. Me quedé de piedra.<br />
–¿De qué le sirve a usted esta at<strong>en</strong>ción que despierta?