Resistencia nacional, formación del Estado y ... - Cholonautas
Resistencia nacional, formación del Estado y ... - Cholonautas
Resistencia nacional, formación del Estado y ... - Cholonautas
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
www.cholonautas.edu.pe / Biblioteca Virtual de Ciencias Sociales<br />
En la parte norte <strong>del</strong> valle <strong>del</strong> Mantaro, por tanto, la tradición oral parece conformar<br />
que la existencia de un frente unido de campesinos, sus autoridades políticas y religiosas, y<br />
la elite jaujina local, fue generalmente exitosa. Todos se unieron contra el invasor; los<br />
héroes de las batallas incluían tanto a indígenas como a sacerdotes. Debido a que la alianza<br />
llevó a la concesión de recompensas políticas a través de la creación de nuevas cabeceras<br />
con la categoría de distrito, tal alianza habría de mantenerse durante los años de la<br />
reconstrucción <strong>nacional</strong> (Comisión Permanente de Historia 1982: II, 172; 180-182; 172-177;<br />
Mallon 1983:105-107). Es así que los pueblos de la subregión de Jauja no desarrollaron<br />
<strong>nacional</strong>ismos alternativos que reclamaran un espacio político más amplio para las<br />
comunidades campesinas en un <strong>Estado</strong> <strong>nacional</strong> reconstruido. En vez de ello, se les<br />
concedió recompensas específicas dentro de relaciones políticas más jerárquicas, lo cual<br />
fue aceptado por las comunidades.<br />
Una vez más la historia fue distinta en las áreas con formas más autónomas de<br />
participación y de discurso, donde los pueblos luchaban repetidamente por mantener el<br />
control sobre sus historias de lucha, y por definir los términos de, su reconocimiento como<br />
ciudadanos y combatientes <strong>nacional</strong>es. En los años de la postguerra, a medida que los<br />
enfrentamientos con el <strong>Estado</strong> parecían interminables, algunos de los pueblos o pobladores<br />
demostraron que estaban dispuestos a aceptar concesiones relativamente menores a fin de<br />
acabar con los conflictos. Pero sus antecedentes previos de autonomía, militancia y rebeldía<br />
pesaban en su contra frente a las autoridades <strong>del</strong> <strong>Estado</strong>, y raramente se les ofreció por lo<br />
menos una fracción de lo que los distritos norteños <strong>del</strong> Mantaro recibieron. E incluso en los<br />
casos en que la oferta fue hecha, no se hizo efectiva. Al final, por tanto, la reintegración de<br />
los distritos más autónomos demostró ser sangrienta, dolorosa y en el mejor de los casos,<br />
parcial. Los <strong>nacional</strong>ismos alternativos de Junín fueron construidos precisamente bajo tales<br />
condiciones problemáticas y fragmentadas.<br />
Un momento temprano de este doloroso y autónomo proceso de construcción tuvo<br />
lugar en abril de 1882, en lo más reñido de la campaña guerrillera contra el ejército chileno.<br />
La montonera de Acobamba entró a la hacienda Punto, de propiedad <strong>del</strong> terrateniente local<br />
Jacinto Cevallos, demandando provisiones. En un intercambio de notas con su<br />
administrador, que fue interceptado por los acobambinos, Cevallos trató de bárbaros a los<br />
montoneros, negándoles de hecho su identidad como soldados-ciudadanos. La respuesta<br />
de los guerrilleros fue rápida e iracunda, y ha sido analizada ampliamente en otro lugar. Lo<br />
que es importante enfatizar aquí es la articulación, dentro de su discurso, de tres elementos<br />
básicos: la conexión de los conceptos de patriotismo y ciudadanía con la defensa de la<br />
“patria” contra la invasión chilena; el contraste entre la traición de Cevallos al comunicarse<br />
24