ANEXOSSe adjuntan algu<strong>no</strong>s documentos utilizados como consultas a la Real Academia Española(RAE).Formación d<strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> en profesionesFecha: Fri, 02 Dec 2005 11:28:04 +0100De:”Consulta2” Asunto: consulta RAE: [formación d<strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> en profesiones]Sobre la formación d<strong>el</strong> femeni<strong>no</strong>, le enviamos la información que aparecerá en <strong>el</strong>artículo género d<strong>el</strong> Diccionario panhispánico de dudas, de próxima publicación:Formación d<strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> en profesiones, cargos, títulos o actividades humanas. Aunqueen <strong>el</strong> modo de marcar <strong>el</strong> género femeni<strong>no</strong> en los sustantivos que designan profesiones,cargos, títulos o actividades influyen tanto cuestiones puramente formales–la etimología, la terminación d<strong>el</strong> masculi<strong>no</strong>, etc.– como condicionamientos de tipohistórico y sociocultural, en especial <strong>el</strong> hecho de que se trate o <strong>no</strong> de profesioneso cargos desempeñados tradicionalmente por mujeres, se pueden establecer las siguientes<strong>no</strong>rmas, atendiendo únicamente a criterios morfológicos:a) Aqu<strong>el</strong>los cuya forma masculina acaba en -o forman <strong>no</strong>rmalmente <strong>el</strong> femeni<strong>no</strong>sustituyendo esta vocal por una -a: bombero/bombera, médico/médica, ministro/ministra, ginecólogo/ginecóloga.Hay excepciones, como piloto, mod<strong>el</strong>o, testigo o sobrecargo, que funcionan comocomunes: <strong>el</strong>/la piloto, <strong>el</strong>/la mod<strong>el</strong>o, <strong>el</strong>/la testigo, <strong>el</strong>/la sobrecargo (<strong>no</strong> debe considerarseuna excepción <strong>el</strong> sustantivo reo, cuyo femeni<strong>no</strong> etimológico y aún vigenteen <strong>el</strong> <strong>uso</strong> es rea, aunque funcione asimismo como común: la reo).79
M A N U A L P A R A E L U S O N O S E X I S T A D E L L E N G U A J ETambién funcionan <strong>no</strong>rmalmente como comunes los que proceden de acortamientos:<strong>el</strong>/la fisio, <strong>el</strong>/la otorri<strong>no</strong>. En algún caso, <strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> presenta la terminaciónculta -isa (d<strong>el</strong> lat. -issa), por provenir directamente d<strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> lati<strong>no</strong> formado coneste sufijo: diáco<strong>no</strong>/diaconisa.b) Los que acaban en -a funcionan en su inmensa mayoría como comunes: <strong>el</strong>/laatleta, <strong>el</strong>/la cineasta, <strong>el</strong>/la guía, <strong>el</strong>/la logopeda, <strong>el</strong>/la terapeuta, <strong>el</strong>/la pediatra. Enalgu<strong>no</strong>s casos, por razones etimológicas, <strong>el</strong> femeni<strong>no</strong> presenta la terminación culta-isa: profetisa, papisa.En <strong>el</strong> caso de poeta, existen ambas posibilidades: la poeta/poetisa. También tienedos femeni<strong>no</strong>s la voz guarda, aunque con matices significativos diversos: la guarda/guardesa.Son asimismo comunes en cuanto al género los sustantivos formadoscon <strong>el</strong> sufijo -ista: <strong>el</strong>/la ascensorista, <strong>el</strong>/la <strong>el</strong>ectricista, <strong>el</strong>/la taxista. Es excepcional<strong>el</strong> caso de modista, que a partir d<strong>el</strong> masculi<strong>no</strong> <strong>no</strong>rmal <strong>el</strong> modista ha generado <strong>el</strong> masculi<strong>no</strong>regresivo modisto.c) Los que acaban en -e tienden a funcionar como comunes, en consonancia con losadjetivos con esta misma terminación, que su<strong>el</strong>en tener una única forma (afable,alegre, pobre, inmune, etc): <strong>el</strong>/la amanuense, <strong>el</strong>/la cicerone, <strong>el</strong>/la conserje, <strong>el</strong>/laorfebre, <strong>el</strong>/la pinche. Algu<strong>no</strong>s tienen formas femeninas específicas a través de lossufijos -esa, -isa o -ina: alcalde/alcaldesa, conde/condesa, duque/duquesa, héroe/heroína, sacerdote/sacerdotisa (aunque sacerdote también se usa como común: lasacerdote). En u<strong>no</strong>s pocos casos se han generado femeni<strong>no</strong>s en -a, como en jefe/jefa, sastre/sastra, cacique/cacica.Dentro de este grupo están también los sustantivos terminados en -ante o -ente,procedentes en gran parte de participios lati<strong>no</strong>s de presente, y que funcionan en sugran mayoría como comunes, en consonancia con la forma única de los adjetivos conestas mismas terminaciones (complaciente, int<strong>el</strong>igente, pedante, etc.): <strong>el</strong>/la agente,<strong>el</strong>/la conferenciante, <strong>el</strong>/la dibujante, <strong>el</strong>/la estudiante. No obstante, en algu<strong>no</strong>scasos se han generalizado en <strong>el</strong> <strong>uso</strong> femeni<strong>no</strong> en -a, como clienta, dependienta opresidenta. A veces se usan ambas formas, con matices significativos diversos: lagobernante (‘mujer que dirige un país’) / la gobernanta (en una casa, un hot<strong>el</strong> o unainstitución, ‘mujer que tiene a su cargo <strong>el</strong> personal de servicio’).d) Los pocos que terminan en -i o en -u funcionan también como comunes: <strong>el</strong>/lamaniquí, <strong>el</strong>/la saltimbanqui, <strong>el</strong>/la gurú.80