VE-16 SEPTIEMBRE 2015
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más común, y también le miraba con cierto temor, pero la curiosidad<br />
terminaba poniéndose por encima del resto de sentimientos. Porque<br />
Bobby le caía bien. Porque nadie más la miraba de aquella manera.<br />
A veces le pedía pequeños favores, como los deberes del día<br />
anterior, o algún cambiazo tonto en los exámenes. Donna siempre<br />
estaba dispuesta a echarle un cable, y Bobby no era de los que<br />
olvidaban un favor. Incluso si la otra persona no lo pedía<br />
expresamente. Y los ojos de Donna le suplicaban que hiciera algo, lo<br />
que sea, cada vez que la miraba. Los moretones de sus brazos. Las<br />
medias rotas de los sábados noche. Sus ojos pedían libertad a gritos.<br />
Una noche cualquiera la invitó al cine después de las clases. Una<br />
película cualquiera. “Aullidos”. Una cosa llevó a la otra, y acabaron en<br />
los asientos de atrás, revolcados entre restos de palomitas, Coca-Cola<br />
y una enorme luna llena alumbrando sus cuerpos, repletos de sudor.<br />
La transformación llegó como algo natural. Donna soltó un chillido<br />
casi inaudible y trató de salir del coche, pero las puertas estaban<br />
bloqueadas (como era de esperar). Con la respiración aún acelerada,<br />
intentó entrar en calma, le miró a los ojos y le suplicó que no lo<br />
hiciera. Que quería ser enfermera, que era lo que su viejo quería, y<br />
una buena esposa, su madre había puesto todos sus esfuerzos para<br />
que así fuera. Que la vida que le ofrecía Bobby no era para ella, en<br />
absoluto, una pobre chica de pueblo, una cualquiera.<br />
Bobby no la dejó terminar y se abalanzó sobre ella. El mordisco<br />
lo cambió todo. Fue doloroso y placentero a la vez, y llegó a su<br />
cerebro como una explosión de imágenes extrañas que no cuadraban<br />
con nada de lo que había vivido hasta entonces. Se apartó de ella, tras<br />
lo que pareció haber durado un suspiro y una eternidad. Las puertas<br />
del coche se abrieron solas, y bastó tan solo una mirada de Bobby<br />
invitándola a salir, a vivir su vida, para que todo lo relevante perdiera<br />
relevancia.<br />
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