12.05.2016 Views

revista25vdef

Revista Mansaborá 25 del IES Profesor Hernández-Pacheco de Cáceres

Revista Mansaborá 25 del IES Profesor Hernández-Pacheco de Cáceres

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

De los números de Mansaborá que coordiné, recuerdo especialmente el n.º 1, por su<br />

sencillez, su maquetación artesanal, también por ser nuestra primera criatura. Su portada,<br />

de gran belleza y de tipo expresionista, fue diseñada por el profesor de Dibujo Francisco<br />

Montanary Villar. La revista fue presentada al Concurso Nacional de Publicaciones Escolares<br />

y recibió un accésit con su correspondiente ayuda económica. El premio fue un acicate para<br />

seguir trabajando en el siguiente número. Recuerdo también el n.º 11 porque poco antes<br />

de su publicación (2002) murió Valeriano Hornero Moreno, nuestro amigo, Director del<br />

centro, animador de Mansaborá y al que dedicamos ese número que con posterioridad<br />

recibiría el 1.º Premio a las Mejores Publicaciones y Revistas Escolares por parte de la<br />

Consejería de Educación de la Junta de Extremadura. No me olvido del n.º 12 (2003) por<br />

recibir el 2.º Premio y por optar a los “Premios del XVII Congreso Nacional sobre Prensa y<br />

Educación” (Barcelona, noviembre de 2003). Como coordinador de la revista acudí a ese<br />

Congreso y la presenté por haber recibido una nominación en el Concurso Nacional de<br />

Periódicos Escolares. Evoco también el n.º 13 (2004) porque en ese curso académico se<br />

conmemoraba el “XXV Aniversario” del IES Prof. Hdez-Pacheco. Fue una edición especial<br />

por convertirse en un bello espejo donde quedó reflejado todo lo vivido con motivo de ese<br />

aniversario. Sería injusto si no citase al n.º 20: llegó mi jubilación y dije adiós a Mansaborá.<br />

Aunque he mostrado predilección por ciertos números, no olvido al resto; siento cariño<br />

y nostalgia por todos ellos. Reconozco que de los veinte primeros números guardo<br />

numerosas vivencias, anécdotas, alegrías…, también sinsabores. Cómo no recordar la<br />

tensión vivida, las largas tardes de trabajo y los nervios sufridos en los momentos de su<br />

edición y maquetación; cómo pasar por alto las horas previas al momento de llevar el<br />

material a la imprenta o cuando de forma febril efectuábamos las correcciones pertinentes<br />

¡Qué nervios y qué estrés! El Dpto. de Historia, el Sancta Sanctorum donde se confeccionaba<br />

su maquetación, era un hervidero de gente que entraba y salía, compañeros que entregaban<br />

artículos en el último momento, alumnos que llegaban con un dibujo, una fotografía o un<br />

artículo fuera de plazo… Recuerdo a los profesores que querían colaborar, los papeles<br />

revueltos en las mesas de trabajo, en el suelo o en las papeleras; los ordenadores con sus<br />

pantallas nerviosas y zigzagueantes, la impresora rechinando, el escáner acelerado… Olor a<br />

papel, a tinta, a calor seco en las largas tardes de abril y mayo.<br />

Pero, año tras año, el día más importante para todos los que editamos Mansaborá tenía<br />

lugar a fínales de mayo o a primeros de junio, cuando el calor golpeaba. Ese día Mansaborá<br />

desembarcaba en el Hdez-Pacheco y los empleados de la imprenta, ayudados por algún<br />

conserje, alumno o profesor, descargaban en el vestíbulo los 750 ejemplares ¡Qué alegría<br />

conocer que nuestra revista ya estaba en el Centro! ¡Cómo disfrutábamos alumnos y<br />

profesores cuando almacenábamos sus números en la Jefatura de Estudios o en la Biblioteca<br />

para comenzar a distribuirlas ¡Qué placer ojearla, acariciar su portada, distinguir sus<br />

I.E.S. “Profesor Hernández-Pacheco”. Año 2016

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!