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se orienta hacia su forma, siguiendo un orden y una razón de ser y disponerse. Es deudor
del maestro, del admirado, del “poeta total” Vicente Aleixandre, y por supuesto de Jorge
Guillén. Deudor es, asimismo, del Barroco (el de la contención, eliminación,
conceptualización) y del modernismo: las aliteraciones, los paralelismos, las figuras fónicas,
el símbolo, el refinamiento, el contraste, la antítesis, la paradoja, la tensión… son recursos
estilísticos identificables y recurrentes en su estética. Pertinente es, finalmente, destacar la
versificación: para Siles la rima es el principio unificador del poema, la arquitectura musical.
Tiene predilección por las formas tradicionales, por estructuras métricas clásicas: sonetos,
liras, romances, romancillos, baladas, coplas… Con precisión y maestría, funde ritmo y
contenido: la rima no es mero procedimiento formal para representar la musicalidad, sino
que ejerce una unión semántica y de sentido entre los términos rimados.
I.E.S. “Profesor Hernández-Pacheco”. Año 2016