Monografia99

grande, del que es una de sus partes. Se acabaron los ceteris paribus
(el resto permanece constante), tan usados en todos los estudios de
previsión.
3. El principio teleológico, en vez del de causalidad. Se interpreta el sistema
estudiado por su comportamiento, su utilidad, su razón de ser. Este
principio niega la linealidad causa-efecto que aportaba el cartesianismo
y, como consecuencia, el determinismo y la reversibilidad del tiempo
(desaparecida la causa desaparece el efecto: volvemos a la situación
anterior). Se trata, junto con el principio anterior de globalidad, el
de mayor aportación conceptual a la Prospectiva y es la base de la planificación
por objetivos.
4. Y por último, el de agregatividad por oposición al de exhaustividad.
Es decir, cada análisis o representación de la realidad debe ser agregativo,
simplificativo en ocasiones, prevaleciendo la percepción global
sobre la precisión del detalle.
Pues bien, la manera de «aproximarse» a los problemas con criterio sistémico,
es decir basándonos, más o menos explícitamente, en los principios
sistémicos citados, es lo que acostumbramos a llamar approach o enfoque
sistémico, y ello es el resultado de un deseo, o al menos una actitud,
de aprehender el fenómeno o problema a estudiar en toda su amplitud o
globalidad.
Por otra parte, el concepto de sistema y las características atribuibles a
los mismos son fruto de un largo proceso intelectual, desarrollado principalmente
en Estados Unidos, en campos tan diversos como son la Biología,
las Matemáticas, la Física, la Ingeniería, la Gestión, etc.
De este modo, a lo largo de la segunda mitad del siglo XX, fueron surgiendo
las diversas escuelas sistémicas, que me limitaré a citar, acompañadas
de la personalidad científica más representativa de cada una de ellas:
— La Teoría General de Sistemas (Bertalanffy).
— La Dinámica de Sistemas (Forrester).
— La Ingeniería de Sistemas (Blanchard).
— El Análisis de Sistemas (RAND Corporation).
— La Teoría de los Sistemas Blandos o Difusos (Checkland).
Algunas de estas escuelas han nacido de la observación y preocupación
por el conocimiento, estudio y control de los sistemas de defensa, desde
sus máquinas y su utilización hasta su organización y procedimientos de
trabajo, de actuación y de toma de decisiones.
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