23.01.2015 Views

Excerpta N° 7 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de Chile

Excerpta N° 7 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de Chile

Excerpta N° 7 - Facultad de Ciencias Sociales - Universidad de Chile

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Sabemos, dice Watzlawick, que una especie <strong>de</strong> realidad real no será jamás accesible. Vivimos únicamente con interpretaciones y<br />

con imágenes, que aceptamos ingenuamente como objetivamente reales . Resulta insostenible cualquier pretendido saber a propósito<br />

<strong>de</strong> una realidad objetiva, y la consecuencia que se sigue casi silogísticamente <strong>de</strong> ello, en cuanto a que sólo las personas mentalmente<br />

sanas perciben correctamente el mundo y viven adaptadas a la realidad. Normalidad y anormalidad no surgen <strong>de</strong> un universo <strong>de</strong><br />

esencias inmutables, sino <strong>de</strong> distinciones y parámetros creados socialmente.<br />

En términos generales, en el <strong>de</strong>venir cotidiano, los hombres no son conscientes <strong>de</strong> estos procesos <strong>de</strong> construcción <strong>de</strong> realidad. La<br />

epistemología <strong>de</strong>l sentido común se asienta firmemente en la suposición <strong>de</strong> que la realidad existe en forma in<strong>de</strong>pendiente <strong>de</strong> toda<br />

influencia humana. Con or<strong>de</strong>n, con sentido y con estabilidad, lo que permite que sea accesible y pre<strong>de</strong>cible para todo aquel que<br />

razona correctamente. Pero esta suposición no cuenta con las simpatías <strong>de</strong>l constructivismo, que prefiere tomar la dirección<br />

exactamente opuesta. Expresado <strong>de</strong> manera muy sucinta, el constructivismo mo<strong>de</strong>rno analiza aquellos procesos <strong>de</strong> percepción, <strong>de</strong><br />

comportamiento y <strong>de</strong> comunicación, a través <strong>de</strong> los cuales los hombres forjamos propiamente, y no encontramos - como<br />

ingenuamente suponemos - nuestras realida<strong>de</strong>s individuales, sociales, científicas e i<strong>de</strong>ológicas, (Watzlawick, 1992. pág. 123).<br />

Se trata <strong>de</strong> una epistemología <strong>de</strong>l observador. Centrada en la pregunta ¿cómo conocemos y no ¿qué conocemos Sostiene que lo<br />

que conocemos resulta <strong>de</strong>l observador y no <strong>de</strong> lo observado, y que es el lenguaje el que genera la noción <strong>de</strong> objetividad. No es<br />

extraño, entonces, que un creciente número <strong>de</strong> autores, como Gregory Bateson, Jean Piaget, Lev Vygostki, Humberto Maturana,<br />

Francisco Varela y otros, puedan ser ubicados bajo la <strong>de</strong>signación genérica (y muy amplia) <strong>de</strong> constructivistas.<br />

Finalmente, el supuesto más preciado <strong>de</strong>l sentido común queda reducido a una sencilla tautología: Si se reflexiona sobre el tema,<br />

está claro que algo es real tan sólo en la medida en que se ajusta a una <strong>de</strong>finición <strong>de</strong> la realidad. Si utilizamos una <strong>de</strong>finición<br />

extremadamente simplificada, pero útil, lo real es aquello que un número suficientemente amplio <strong>de</strong> personas ha acordado <strong>de</strong>finir<br />

como real, (Watzlawick y otros, 1986, pág. 121). O como se expresa en otro lugar: Real es, al fin y al cabo, lo que es <strong>de</strong>nominado<br />

real por un número suficientemente gran<strong>de</strong> <strong>de</strong> hombres. En este sentido extremo, la realidad es una convención interpersonal<br />

(Watzlawick, 1992, pág. 17).<br />

Watzlawick utiliza un singular grabado medieval en el cual se observa un hombre que luego <strong>de</strong> un largo caminar alcanza el fin <strong>de</strong>l<br />

mundo. Lleno <strong>de</strong> júbilo, parado exactamente en el límite <strong>de</strong> lo interior y lo exterior, se convierte en un observador privilegiado, con<br />

una perspectiva propia <strong>de</strong> los dioses. Pue<strong>de</strong> ver <strong>de</strong>s<strong>de</strong> fuera el mundo tal como es, la verdad pura, objetiva, sin contaminación <strong>de</strong><br />

ninguna especie. Una pretensión reiterada en la historia, pero tan peregrina como la anécdota <strong>de</strong>l Barón <strong>de</strong> Münchhausen, en la cual<br />

tomándose firmemente <strong>de</strong> su coleta, se levanta a si mismo por los aires (y a su caballo firmemente apretado entre sus rodillas),<br />

salvándose <strong>de</strong> morir ahogado, (1992, cap. 10).<br />

Una nueva mirada sobre el mito <strong>de</strong> la caverna <strong>de</strong> Platón nos permite advertir que expresa la misma sentida pretensión.<br />

Desprendiéndose <strong>de</strong> las ca<strong>de</strong>nas que los atan a un mundo <strong>de</strong> apariencias, los hombres que sólo conocen las sombras que se

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!