El sÃn - Pfizer
El sÃn - Pfizer
El sÃn - Pfizer
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
50 12 personajes en busca de psiquiatra<br />
que en las representaciones cerebrales de lo social civilizado<br />
hay que pagar un precio: un aumento de los niveles de<br />
preocupación por uno, por los familiares, por los amigos<br />
y por los extraños. Este tipo de preocupación general parece<br />
aumentar los niveles de estrés, los niveles de ansiedad<br />
y finalmente el agotamiento y la depresión. La razón para<br />
que esto pase sería que una importante proporción de los<br />
cerebros humanos todavía no dispone de los dispositivos<br />
biológicos para funcionar con espontaneidad y eficiencia,<br />
sin esfuerzos, de esta forma racional y organizada.<br />
Por ahora habría que decidir por uno de los dos caminos<br />
sociales posibles. Uno es el camino de la felicidad del desorden<br />
folclórico e irresponsable (Colombia es uno de los<br />
países más felices del planeta), en donde cualquiera puede<br />
tomarse la atribución de quitarle al otro el derecho a seguir<br />
viviendo, con lo cual se garantiza una muerte “feliz y divertida”<br />
por mano ajena, a través del tiro de un sicario, o en<br />
la sala de espera de un hospital porque así lo determinó el<br />
gerente de una EPS, o por la irresponsabilidad de un constructor<br />
que hizo unas casas en terrenos inestables, o por la<br />
locura de un conductor borracho con investidura de parlamentario,<br />
o por la irresponsabilidad de un contratista que<br />
usaba una grúa inadecuada que se cayó sobre un bus lleno<br />
de pasajeros, o por otras miles de formas alternas de muerte<br />
indigna: la muerte inesperada en la mitad de la calle, sorpresiva,<br />
que lo alcanza a uno vestido de manera inapropiada,<br />
sin preparación ni ceremonia.<br />
<strong>El</strong> otro es el camino de la satisfacción de esforzarse civilizadamente<br />
por el bienestar propio y el de los demás, con el<br />
riesgo del aburrimiento, que pudiera llevar a la decisión de<br />
hacer uso soberano del derecho a morir cuando uno quiera<br />
y como uno quiera, que algunos llaman el derecho a la<br />
muerte digna, el cual debería ser consagrado como un derecho<br />
fundamental universal.