El sÃn - Pfizer
El sÃn - Pfizer
El sÃn - Pfizer
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Florentino Ariza: Quijote y Don Juan<br />
patologías. Algunas corresponden a un trastorno de la personalidad<br />
donde prima la escisión, la división del yo. Por ejemplo un hombre<br />
puede, por un lado, ser un ejecutivo, un profesional exitoso además<br />
de buen padre y esposo, y por otro con la parte escindida, un adicto al<br />
sexo (con prostitutas, con personas que trabajan con él y son sus subalternas,<br />
entre otras) […]. ¿Existe la normalidad sexual? Obviamente<br />
sí: es cuando lo sexual hace parte de la vida y el amor de la pareja, de su<br />
comunicación, de su intimidad física y emocional […]. Posiblemente<br />
esto es lo ideal. 6<br />
Como podemos ver, la adicción sexual, tan en boga en nuestro<br />
medio, no es otra cosa que una creación ideológica sin<br />
ningún respaldo científico, que surge de la fe de psicoanalistas<br />
y psicólogos y que la identifica con la infidelidad masculina<br />
y con los perjuicios que esta pueda causar.<br />
De otra parte, la palabra adicción se ha frivolizado y devaluado<br />
al punto de que ha desaparecido, tiempo ha, de los<br />
manuales de diagnóstico y estadística de la psiquiatría actual<br />
y de las publicaciones científicas de la especialidad, cuando<br />
se refieren a los trastornos relacionados con el consumo de<br />
sustancias psicoactivas.<br />
Las opiniones de Freud, Marañón, Martí-Ibáñez y ahora<br />
Juan Manuel Escobar, así como las de los psicólogos acerca<br />
de los adictos sexuales, parecen más una diatriba moral, un<br />
juicio de valor, que un diagnóstico psiquiátrico. Nuestros<br />
eminentes psicólogos no hacen diferencia entre ciencia e<br />
ideología y se olvidan de que la ideología no necesita ser<br />
demostrada pues solo basta con creer en ella. Porque la<br />
moral cristiana no puede concebir como normal aquellas<br />
conductas que se aparten de su ideal monogámico y heterosexual,<br />
los comportamientos “disipados” de Florentino<br />
Ariza, en su faceta de seductor, deben ser vetados. Los cristianos<br />
están en su derecho de pensar así; pero la ciencia no<br />
6. Escobar, Juan Manuel. “Adicción al sexo”, en periódico <strong>El</strong> Tiempo, 23 de febrero<br />
de 2005.<br />
97