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La primera cuestión del análisis es una de las fuerzas internas. El National Congress ����������������������������������������������������������������������������������
Party (NCP), con Omar al-Bashir a la cabeza detentaba el poder a nivel nacional; 32 el
partido se ha caracterizado por promover una política de islamización radical, y unir bajo la
égida del régimen árabe-islámico a todo el país. Pero el NCP no se detiene allí: desde que
al-Bashir se hizo con el poder en 1989, se ha dedicado a acaparar poder, influencia y
bienestar económico. 33 Esta es una razón de peso, que debe modificarse si quiere llegarse a
una solución.
Otro de los intereses del NPC es provocar la inestabilidad en las zonas fronterizas,
para evitar que los refugiados encuentren asilo:
[…] para empeorar el asunto, la violencia patrocinada por el NPC se propaga
más allá de las fronteras sudanesas…como parte de su estrategia de guerra en
Darfur, el gobierno sudanés insta a un conflicto próximo con el vecino Chad,
en un esfuerzo por negar a los rebeldes de Darfur asilo en ese país. 34
Cómo se mencionó anteriormente, mientras el NCP, en principio, se avocaba por
una causa política (el imperio de un régimen político árabe-islámico) ahora se ha alienado
en un corrupto régimen que se enriquece en el poder: “No obstante el régimen llegó al
poder con una agenda islamista radical, su principal raison d’être es ahora el hacer
dinero”. 35 Su objetivo: aprovechar las ganancias que la explotación de petróleo deja al país,
o mejor dicho, al régimen de Bashir; mantener al Sur y sus riquezas petrolíferas es el
objetivo número uno en la agenda de Bashir y el NPC: “Bashir y sus lugartenientes
buscarán conservar el poder y mantener la integridad territorial de Sudán por todos los
medios necesarios para continuar enriqueciéndose ellos mismos, principalmente a través de
la explotación del petróleo”. 36
32
Cuestión que cambió cuando se hizo efectiva la separación de Sudán en julio de 2011.
33
Como ejemplo, así lo condena Mahmoud A. Suleiman en su artículo “Hypocrisy of Sudan’s NCP and
double standards of the Arab media”, en el cual expone las estratagemas utilizadas por el NCP para enemistar
a los rebeldes libios contra el Movimiento de Justicia e Igualdad (JEM por sus siglas en inglés) de Darfur.
(http://www.sudantribune.com/Hypocrisy-of-Sudan-s-NCP-and,38167) 03 de marzo 2011. Consultado el 1 de
junio de 2011.
34
Prendergast, J. y Thomas-Jensen, C., óp. cit., p. 210.
35
Ídem.
36
Ídem. Esta situación, obviamente, tendrá que cambiar con el reconocimiento de Sudar del Sur por la
comunidad internacional.
UNIVERSÓPOLIS Revista Estudiantil de Relaciones Internacionales n°1. Año 0, pp. 79-108 91