27.09.2016 Views

UN CRIMEN

6IOhBK0wz

6IOhBK0wz

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

la policía. Encontraron dos cuerpos desangrados. Las evidencias forenses y<br />

de análisis de la escena del crimen fueron concluyentes: asesinato y suicidio<br />

inusual. Desde luego, nada salió como había planificado.<br />

1269. SARA DÍAZ PINAR – SIN TÍTULO<br />

¿Eres tan valiente como para mirar a un pobre diablo? Sé prudente; los<br />

monstruos también salimos de día. No te asustes porque solo soy un animal<br />

salvaje que tiene hambre, procuro controlarme, pero soy insaciable. No<br />

puedo evitar mirarte; imagino tu olor, el tacto de tu piel... Al ver cómo me<br />

miras, sé que me lo vas a poner difícil, eso es lo divertido de la caza. ¿No lo<br />

ves como una manera de experimentar nuevas sensaciones? Cuando notes la<br />

sangre por tu cuerpo, me pedirás lo que me piden todas: la libertad, ingenua.<br />

¿Por qué te lo iba a conceder? Shhh, querida, no te alarmes, este será nuestro<br />

secreto y, aunque no lo sepas todavía, te lo llevarás a la tumba antes que yo,<br />

así que déjame que me acerque; quiero llevar a cabo esta fantasía, oírte gritar y<br />

no de placer.<br />

1270. SARA GALINDO GARCÍA – SIN TÍTULO<br />

Llego al hotel más elegante de la ciudad, camino hacia el ascensor,<br />

cabizbaja, por si hay alguna cámara, no quiero dejar pruebas. Subo sola<br />

mientras repaso el plan previsto. Cuando menos me lo espero, llegó a la<br />

habitación 503, respiró hondo y llamó. La puerta se abre y detrás de ella hay<br />

un hombre, un hombre joven, tiene que tener mi edad. Me mira de arriba<br />

abajo; cuando nuestras miradas se cruzan, sonríe y con un gesto hace que<br />

entre. Observo con detenimiento toda la habitación; sé que me está diciendo<br />

algo. A pesar de que no sé el qué, asiento. No tengo que dejar huellas; si las<br />

dejo, estoy muerta. No hay cámaras. Me siento a su lado, me sigue hablando<br />

y yo le sigo ignorando. Después de que se haya bebido tres copas, pienso<br />

que es mi oportunidad, me quito los tacones con la excusa de que estoy<br />

cansada, pero le clavo uno en la tráquea. Observo cómo muere; es una pena<br />

que me gane la vida haciendo los trabajos sucios de los demás.<br />

1271. SARA HERRERAS CASTEL – EL ASESINO JUSTICIERO<br />

—¿Por qué le mataste? —volvió a preguntar Frank Miller refiriéndose al<br />

marido de la asesina.<br />

—Porque quería —respondió la mujer con un cigarrillo; un lujo para<br />

que testificará.<br />

—Has admitido el crimen, te felicito, pero quiero saber la razón —<br />

insistió el detective de Homicidios—. ¿No quieres reducir tu condena?<br />

—Un justo castigo para un justo asesinato —palpó la cruz que llevaba al<br />

cuello mientras echaba el humo lentamente—. Tenía una niñita, pero... —Se<br />

le quebró la voz.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!