05.03.2013 Views

Aprender y enseñar ciencias: del laboratorio al aula y viceversa

Aprender y enseñar ciencias: del laboratorio al aula y viceversa

Aprender y enseñar ciencias: del laboratorio al aula y viceversa

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

sino que viene de los psicodélicos 60 y 70, en los que si el mundo experimentaba en<br />

carne propia numerosas novedades, no cabía otra posibilidad que contagiar este afán<br />

de experimentación y descubrimiento <strong>al</strong> <strong>aula</strong> de <strong>ciencias</strong>. Escuchemos si no a Piaget, con<br />

oídos de siglo XXI:<br />

Cada vez que se enseña prematuramente a un niño <strong>al</strong>go que hubiera podido<br />

descubrir solo, se le impide inventarlo y, en consecuencia, entenderlo completa-<br />

mente. 34<br />

Estas ideas revolucionarias llevaron a postular en esos años dorados la posibilidad <strong>del</strong><br />

aprendizaje por descubrimiento. En su momento esto representaba la panacea y el escudo<br />

contra los procesos tradicion<strong>al</strong>es de clases magistr<strong>al</strong>es, memorización y repeticiones<br />

automáticas de experimentos de dudosa form<strong>al</strong>idad. Esta postura pone un énfasis casi<br />

absoluto en los procedimientos por sobre los contenidos concretos, la idea –muy sesentista,<br />

si las hay– es s<strong>al</strong>ir a observar el mundo y formular hipótesis con ingenuidad absoluta.<br />

Justamente, se olvidaba que nuestras queridas bestezuelas vienen con sus ideas en la<br />

cabeza, que no necesariamente se cambian por observar con atención <strong>al</strong>go que va en<br />

contra de esas mismas ideas. Por otro lado, la idea de aprendizaje por descubrimiento,<br />

llevada <strong>al</strong> extremo, pretende que la re<strong>al</strong>idad misma nos “dice” cómo funciona el mundo,<br />

incluyendo cuestiones re<strong>al</strong>mente complejas que a los científicos les llevó siglos entender.<br />

T<strong>al</strong> vez en esto radique una de las mayores defi<strong>ciencias</strong> <strong>del</strong> mo<strong>del</strong>o: por más que mire<br />

durante mucho tiempo cómo flota un objeto, es muy poco probable que un chico, solito,<br />

entienda el fenómeno de la flotación y el empuje.<br />

T<strong>al</strong> vez el problema sea, como tantas otras veces, la distinción absoluta entre extremos.<br />

En cuestiones de enseñanza, Ausubel y colaboradores35 sugieren que estos extremos<br />

podrían ser los de aprender de memoria versus aprender <strong>al</strong>go significativo. Pero de ahí a<br />

pensar que la enseñanza tradicion<strong>al</strong> es siempre memorística y que la de descubrimiento<br />

es siempre significativa hay un largo trecho.<br />

Como sea, más <strong>al</strong>lá de las críticas que se le han formulado hasta dejarlo un tanto humillado<br />

en el rincón, el aprendizaje por descubrimiento se va acercando, de a poco, a un en-<br />

34 Piaget, J. Citado en Pozo, J. I. y Carretero, M. “Del pensamiento form<strong>al</strong> a las concepciones espontáneas: ¿Qué<br />

cambia en la enseñanza de la ciencia?” Infancia y Aprendizaje, 38, 35-52, 1987.<br />

35 Ausubel, D. P., Novak, J. D. y Hanesian, H. Education<strong>al</strong> Psychology: A Cognitive View. Nueva York, Holt, Rinehart<br />

and Winston, 1978.<br />

47

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!