REVISTA NACIONAL - Publicaciones Periódicas del Uruguay
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<strong>REVISTA</strong> <strong>NACIONAL</strong><br />
ganaduras y miedos, copa colmada de horror; léase «El subterrá·<br />
neo», léase «Los perros y los muertos». Tanto la femineidad esen·<br />
cial como la tremenda congoja humana afloran a inspiraciones de<br />
acento dramático que informa un lacerado y clamoroso sentido solidario;<br />
tal «La puerta abierta», tal «Alguien está llamando», tal<br />
«Tiempo de éxodos». Dice así «La puerta abierta»:<br />
Pensamos una vez<br />
que no había nada mejor que nuestra puerta<br />
con su cerrojo bien echado<br />
y su aldaba quieta.<br />
La noche mordía como un ácido<br />
el umbral y los clavos<br />
y los pedidos de socorro se morían<br />
de fatiga y de horror a su costado.<br />
Alguna mano obscura nos llamaba<br />
arañando y golpeando...<br />
La moneda de luz, en nuestra mesa,<br />
sobre la placidez de nuestras manos!<br />
Fué cuando aquella calle se nos vino<br />
en oleadas de niños sin zapatos<br />
cuando en el hombro nos tocó la Mano!<br />
.Abrimos nuestras puertas a la noche<br />
y el dolor se hizo un hueco a nuestro lado.<br />
De parecida inspiración, pero más tremenda resonancia; como<br />
parable con «Brumas (Yo soy un gran jardín de noviembre, un jaro<br />
dían desconsolado -donde tiritan los abandonados <strong>del</strong> viejo arra·<br />
bal), pero más amarga y obsesiva que la creación de Milosz, ésta que<br />
nos sobrecoge cada vez que volvemos a ella:<br />
ALGUIEN ESTA LLAMANDO<br />
Escuchemos! por favor, escuchemos!<br />
Que cese el manubrio <strong>del</strong> piano rodante<br />
que mastica las vértebras de la hora!<br />
Que callen las bocas de .los cromos<br />
y de las botellas con olor a sueño!<br />
Que calle el ruido inmenso de la bola<br />
que empujan los escarabajos.<br />
y el de la risa obscura de la taba,