Kasbah nº 23 - Ministerio de Educación
Kasbah nº 23 - Ministerio de Educación
Kasbah nº 23 - Ministerio de Educación
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
nes simétricas con las que por<br />
acuerdo <strong>de</strong> los jugadores<br />
comenzaba la partida, y no<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> la posición inicial. El<br />
estudioso árabe Al-Adli en su<br />
Libro <strong>de</strong>l ajedrez (año 842) ya<br />
indicaba:<br />
"...es admitido que en la<br />
India se inventaron tres cosas<br />
que en este tiempo fueron<br />
absolutamente nuevas y originales,<br />
sin que existiese en ninguna<br />
parte nada que se les<br />
pareciese. Estas tres cosas<br />
son: el libro <strong>de</strong> fábulas <strong>de</strong><br />
Calila y Dimna, los nueve<br />
números con los que se<br />
pue<strong>de</strong> contar hasta el infinito,<br />
y el juego <strong>de</strong>l ajedrez". 2<br />
Quizá el primer tratado completo sobre el ajedrez conocido<br />
en Occi<strong>de</strong>nte lo elaboró Abul Abbas (890), médico en Bagdad.<br />
Este tratado se complementa con el <strong>de</strong> As-Suli, don<strong>de</strong> se explican<br />
los movimientos <strong>de</strong> las piezas. En el siglo XI, Al-Qaim, el<br />
califa <strong>de</strong> Bagdad, escribe:<br />
¡Oh, tú!, que censuras con cinismo<br />
nuestro juego favorito y <strong>de</strong> él te burlas,<br />
sepas que es pura y sutil ciencia.<br />
Él disipa la aflicción extrema.<br />
Reconforta al enamorado inquieto,<br />
y aparta al bebedor <strong>de</strong> los excesos.<br />
<strong>Kasbah</strong> IEES Severo Ochoa Nº <strong>23</strong><br />
Reyes jugando al ajedrez<br />
Si acecha o amenaza el riesgo,<br />
aconseja en su arte al guerrero.<br />
Él nos presta compañía<br />
cuando nos domina el tedio.<br />
EL AJEDREZ ÁRABE: REGLAS Y TRATADOS<br />
El ajedrez que aparece en los tratados árabes se regía por<br />
reglas distintas a las actuales. Por ejemplo, no existía la pieza<br />
<strong>de</strong> la Dama y, en su lugar, encontramos el Fiz, Firzan o Visir,<br />
que se mueve solamente una casilla en diagonal (hacia a<strong>de</strong>lante<br />
o hacia atrás) y captura <strong>de</strong> ese mismo modo (diagrama<br />
abajo). A<strong>de</strong>más, los alfiles saltan exactamente dos casillas en<br />
diagonal (hacia a<strong>de</strong>lante o hacia atrás), aunque haya piezas en<br />
medio, como suce<strong>de</strong> en el problema <strong>de</strong> la dama que aparece<br />
abajo. Y capturan <strong>de</strong> ese mismo modo. El rokh (Torre) avanza<br />
en línea recta en todos los sentidos. Si un baidaq (peón), en su<br />
avance, alcanzaba la octava fila, se transformaba en firzan,<br />
pero no podía avanzar dos casillas, ni siquiera en su primer<br />
movimiento, y siempre lo hace en línea recta, excepto la captura,<br />
en diagonal. El farash (caballo) podía saltar sobre las<br />
<strong>de</strong>más piezas, regla que se ha mantenido hasta la actualidad.<br />
No existía el enroque, y si un jugador perdía todas sus piezas,<br />
excepto el Rey, o si éste no podía moverse, se consi<strong>de</strong>raba<br />
<strong>de</strong>rrotado. Con estas reglas es como los gran<strong>de</strong>s maestros <strong>de</strong> la<br />
época <strong>de</strong>sarrollan prodigiosas obras <strong>de</strong> imaginación, sobre<br />
todo en lo relacionado con los problemas <strong>de</strong> ajedrez. En la<br />
época abasí, entre los siglos VIII y X, gran<strong>de</strong>s ajedrecistas escriben<br />
sus tratados, que contienen problemas <strong>de</strong> gran agu<strong>de</strong>za e<br />
ingenio, como en los libros anteriormente citados <strong>de</strong> Al-Adli,<br />
Ar-Razi, As-Suli, Al-Lailah y Al-Iqlidisi.<br />
33