13.05.2013 Views

EPIDEMIOLOGIA DE ENFERMEDAD HEMORRAGICA ... - citaREA

EPIDEMIOLOGIA DE ENFERMEDAD HEMORRAGICA ... - citaREA

EPIDEMIOLOGIA DE ENFERMEDAD HEMORRAGICA ... - citaREA

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Revisión bibliográfica<br />

2.4.6.1-Lesiones macroscópicas<br />

Macroscópicamente, las alteraciones visibles son muy variables de un caso clínico<br />

a otro, si bien las más fácilmente detectables afectan sobre todo a pulmones y tráquea y en<br />

menor medida al hígado.<br />

La tráquea suele presentar congestión y hemorragias y en ocasiones un contenido<br />

espumoso sanguinolento (Argüello y cols. 1988; Pagés 1989; Rosell y cols. 1989;<br />

Tesouro-Vallejo cols. 1990; Marcato y cols. 1991; Lenghaus 1993). Los pulmones<br />

presentan un grado de congestión variable, acompañado de edema y hemorragias, también<br />

de intensidad variable (petequias, equimosis y subfusiones), incluso con zonas de clara<br />

hepatización (Argüello y cols 1988; Rosell y cols. 1989; Tesouro-Vallejo y cols. 1990;<br />

Marcato y cols. 1991; Lenghaus 1993).<br />

El hígado, en las formas sobreagudas, suele aparecer aumentado de tamaño,<br />

congestivo, y de color más oscuro con el dibujo lobulillar muy marcado (Argüello y cols.<br />

1988; Pagés 1989; Tesouro-Vallejo y cols. 1990), mientras que en las formas agudas está<br />

hipertrofiado y de un color pálido-amarillento con una consistencia friable (Tesouro-<br />

Vallejo y cols 1990; Lenghaus 1993).<br />

Respecto a otros órganos, el bazo puede estar o no aumentando de tamaño y<br />

congestivo (Argüello y cols. 1988; Pagés 1989; Rosell y cols. 1989; Tesouro-Vallejo y<br />

cols. 1990; Marcato y cols. 1991; Lenghaus 1993). Los riñones pueden aparecer<br />

congestivos y aumentados de tamaño, con hemorragias subcapsulares que van desde las<br />

equimosis hasta las subfusiones, su consistencia puede ser blanda con el borde renal<br />

fruncido y deformado, y tanto la zona medular como la cortical pueden aparecer<br />

congestivas y hemorrágicas (Argüello y cols. 1988; Rosell y cols. 1989). También se han<br />

observado petequias y congestión en timo, músculo cardíaco, cuerpo del estómago,<br />

intestino delgado y grueso, mucosas y cerebro (Argüello y cols. 1988; Rosell y cols. 1989;<br />

Marcato y cols. 1991).<br />

En general, si el síndrome hemorrágico es severo, se observa congestión<br />

generalizada de toda la canal, con dilatación de los vasos sanguíneos repletos de sangre no<br />

coagulada en su interior, e incluso se puede observar ascitis e hidrotórax<br />

serohemorrágicos. Sin embargo, cuando la severidad del síndrome hemorrágico es<br />

mínima, únicamente se observan animales sin lesiones aparentes, salvo una ligera<br />

alteración hepática (Rosell y cols. 1989; Lenghaus 1993).<br />

70

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!