Educación y Sociedad del Conocimiento: Introducción a la
Educación y Sociedad del Conocimiento: Introducción a la
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Tener en nuestras manos, como educadores y educadoras, el destino cognoscitivo de<br />
alumnos y alumnas, poder incidir en su libertad de pensamiento, fraguar un marco ético,<br />
son aspectos muy importantes; entonces revisemos nuestras creencias y verdades sobre <strong>la</strong><br />
persona, e intentemos esbozar <strong>la</strong> visión antropológica que tenemos de cara a lo educativo,<br />
ya que sin pretenderlo estamos siempre configurando y contrastando al alumno o alumna<br />
con mo<strong>del</strong>os, cuyos fundamentos pueden ser determinantes para su futuro.<br />
Ser docente en Centroamérica, más que una profesión, es un reto ante un fatal<br />
destino de estancamiento social y económico; a pesar de los múltiples esfuerzos, de <strong>la</strong>s<br />
reformas y transformaciones el status docente continúa siendo una profesión de segunda o<br />
tercera categoría que no abriga muchas esperanzas de superación; los sa<strong>la</strong>rios magisteriales<br />
denotan un verdadero estancamiento, y son síntomas de <strong>la</strong> escasa dignificación de <strong>la</strong><br />
profesión docente, en efecto, cuando <strong>la</strong> oferta sa<strong>la</strong>rial da un paso <strong>la</strong> demanda <strong>del</strong> gasto<br />
cotidiano da cinco; sin embargo, a pesar de este escenario funesto, todavía existe mucha<br />
gente solidaria que tiene vocación de servicio y se entrega a esta noble profesión<br />
minusvalorada por <strong>la</strong> sociedad y el gobierno, a pesar que estos mismos tengan que poner<br />
sus hijos e hijas en manos de estos artesanos y artesanas de conciencia y de conocimientos.<br />
¿Qué significa ser docente hoy?, ¿cuáles son los retos <strong>del</strong> magisterio ante <strong>la</strong>s<br />
amenazas y oportunidades globales?<br />
Algunas tendencias actuales basadas en el constructivismo pretenden reducir el rol<br />
<strong>del</strong> o <strong>la</strong> docente a una simple visión de “Facilitador o Facilitadora”; sin embargo, <strong>la</strong>s<br />
exigencias de una agenda constructiva no deben hacer <strong>del</strong> docente un espectador o<br />
ayudante <strong>del</strong> aprendizaje, por el contrario el o <strong>la</strong> docente debe ser un verdadero “Mediador<br />
o Mediadora” entre el cúmulo de conocimientos y saberes y <strong>la</strong>s experiencias <strong>del</strong> alumnado;<br />
esto supone una tarea articu<strong>la</strong>dora, creativa e innovadora en donde ensamble los andamios<br />
<strong>del</strong> cúmulo histórico de <strong>la</strong> humanidad y de <strong>la</strong>s vivencias personales y colectivas <strong>del</strong> au<strong>la</strong>;<br />
así, debe facilitar <strong>la</strong> “desconstrucción” de experiencias negativas y <strong>la</strong> “construcción” de<br />
experiencias positivas, porque no todo es ético ni en el devenir histórico ni en <strong>la</strong> persona<br />
misma.<br />
Entonces, los y <strong>la</strong>s docentes deben ser: Mediadores Analíticos, que inquieran<br />
racionalmente <strong>la</strong> realidad y sobre el<strong>la</strong> diseñen <strong>la</strong> arquitectura de conocimientos; Mediadores<br />
Hermenéuticos, que interpreten correctamente y descubran los símbolos apropiados para el<br />
aprendizaje; y Mediadores Prácticos, basados en un quehacer docente ético y eficiente.<br />
Las corrientes contemporáneas invitan a reflexionar en un nuevo mo<strong>del</strong>o de<br />
docencias y cada vez más se hab<strong>la</strong> <strong>del</strong> “Pedagogo Investigador o Pedagoga Investigadora”,<br />
es decir, un quehacer docente centrado en acciones técnicas específicas, cuyas capacidades<br />
deben ser eminentemente profesionales en lo que respecta a contenidos, metodologías,<br />
tecnologías, evaluación, etc. y que además, diseña su agenda pedagógica en un permanente<br />
diálogo con el quehacer investigativo endógeno y exógeno al au<strong>la</strong>.<br />
Otros teóricos y teóricas invitan a construir un perfil docente siguiendo los criterios<br />
<strong>del</strong> informe de <strong>la</strong> UNESCO para <strong>la</strong> educación <strong>del</strong> siglo XXI: a) el aprender a conocer; b) el<br />
aprender a hacer; c) el aprender a convivir; y d) el aprender a ser; esto supone que los y <strong>la</strong>s<br />
docentes deben facilitar y mediar los aprendizajes desde estas cuatro perspectivas,<br />
superando <strong>la</strong>s visiones reductivas cognitivas e integrando aspectos vitales y existenciales<br />
como lo son <strong>la</strong>s habilidades, <strong>la</strong> convivencia social y <strong>la</strong> ética.<br />
Al margen de estas visiones, <strong>la</strong> tarea docente cada día se hace más compleja, no sólo<br />
por que cada día existe más información y más acceso a los nuevos conocimientos, sino<br />
también porque sus responsabilidades cotidianas cada vez son más complejas; en <strong>la</strong><br />
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