VI Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclos A, B y C - Autores Catolicos
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MAGISTERIO<br />
La doctrina social forma parte de la acción cara a Dios<br />
de los cristianos en el mundo, una acción en pro de<br />
toda persona humana.<br />
Ecclesia in Europa: n. 99.<br />
“La Doctrina Social de la Iglesia por su relación<br />
intrínseca con la dignidad de la persona, está<br />
formulada para ser entendida también por los que no<br />
pertenecen a la comunidad de los creyentes. Es urgente<br />
pues difundir su conocimiento y estudio, superando la<br />
ignorancia que se tiene de ella incluso entre los<br />
cristianos. Lo exige la nueva Europa en vías de<br />
construcción, necesitada de personas educadas según<br />
estos valores y dispuestas a trabajar con ahínco en la<br />
realización <strong>del</strong> bien común. Es necesaria la presencia<br />
de laicos cristianos que en las diversas<br />
responsabilidades de la vida civil, de la economía, la<br />
cultura, la salud, la educación y la política, trabajen<br />
para infundir en ellas los valores <strong>del</strong> Reino”.<br />
ASCÉTICA<br />
La disponibilidad a formar la conciencia por su<br />
debilidad<br />
“Nuestra actitud debe ser más bien la contraria, la de<br />
una apertura sin reservas con aquel de nuestros<br />
hermanos al que hayamos confiado la carga de<br />
escucharnos y aconsejarnos. Abrir de par en par las<br />
ventanas de nuestra alma para que el aire fresco y<br />
vivificador <strong>del</strong> Espíritu Santo ventile todos los<br />
rincones. Se supone que buscamos la santidad, el mejor<br />
servicio de Dios; se supone que deseamos ser<br />
instrumentos, que conocemos nuestra propia<br />
incapacidad”. (Federico Suárez: El sacerdote y su<br />
ministerio).<br />
SOCIEDAD<br />
“El Estado representa el bien común frente a los<br />
intereses privados que sólo buscan su propio<br />
enriquecimiento. ¡Qué bien suena esta afirmación. El<br />
perfecto idiota latinoamericano la propaga en foros y<br />
balcones suscitando inmediatamente aplausos. Y<br />
realmente, a primera vista, parece un concepto<br />
plusible. Le permite además presentarse como hombre de<br />
avanzada haciendo suya una idea cara al populismo de<br />
este continente: si la pobreza es el resultado de un<br />
inicuo despojo perpetrado por los ricos, si los pobres<br />
son cada vez más pobres porque los ricos son cada vez<br />
más ricos; si la prosperidad de éstos tiene como precio<br />
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