Teoria de genero

de ser violada, así como la amenaza de represión contra su
familia. La sola convicción de no quebrarse, porque detrás de
ella habían muchos más, le permitió sobrevivir a la tortura, a
la cárcel y el relegamiento, tal como lo expresa:
“Ud Tenía miedo señora Fresia? (…)
F. yo diría que sí, diría que era temor, pero no pánico, porque
hay una cosa que es bien cierta y se va sembrando en uno, o
digamos que el asunto este de saber que uno tiene que pagar
un precio. Uno sabe y esta conciente de que esta haciendo
algo que uno encuentra bien, que es su verdad, pero sabemos
que hay otra gente que tiene otras posiciones, otros intereses
y los van a defender; y por uno defender los intereses de uno
y del resto de la gente (…) uno tiene que pagar un precio,
tarde o temprano lo tiene que pagar. Cuál y que tan alto va a
ser? No lo sabes, pero siempre lo tuve; siempre tuve esa idea.
Y no sólo la tuve por mi misma… sino que eso era
conversado, eso era preconcebido.
Tuvimos miedo, angustia, impotencia, pero creo que el
sentimiento más grande era el odio y la impotencia. Todo eso
superaba al miedo. Era un sentimiento de angustia de que es
lo que va a ocurrir, pero no el miedo personal 16 .
Un último aspecto interesante en torno al cual reflexionamos,
es el que compromete la autorización de este testimonio,
Fresia nos trae un nuevo relato, desde el presente, donde a
pesar de la distancia temporal, la memoria adquiere una gran
significación, un sentido que se actualiza en el recuerdo de
16 Ibídem p.9
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