E - Franquicias Hoy

De
empresario
a
franquiciador
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Un producto de laboratorio que recupera
la innovación en la hostelería
“El sector necesita un poco de tiempo e ideas nuevas para seguir
adelante”, explica Oswaldo Herrero, responsable de Expansión y
cabeza visible de Nurielle, un proyecto que ha llegado como un soplo
de aire fresco a un mercado como la restauración, tradicionalmente
ávido de novedades. La cadena madrileña comenzó a gestarse en
2007 de la mano de un grupo de empresarios con amplia experiencia
en el sector, con Ángel Sierra y Mónica Cordavias a la cabeza, si bien
no sería hasta octubre de 2008 cuando se inaugurara el primer local
de la enseña. En definitiva, más de un año de preparativos para crear
“un espacio distinto donde poder desayunar charlando en un ambiente
tranquilo y elegante, que cubriera las máximas horas posibles del día
y con una gran variedad de productos”, añade Herrero.
Uno de sus primeros deberes fue “encontrar el mejor maestro
heladero italiano” que les enseñara las centenarias recetas familias.
Hoy forma parte de su staff. Luego “los mejores pasteleros”… así se
conformó un concepto del que destacan su cuidado ambiente y sus
cuatro líneas de negocio principales, desde cafetería hasta pastelería,
heladería o coctelería. No obstante, desde Nurielle se reconoce que “la
idea de la franquicia no surgió hasta más tarde”, fruto del rápido éxito
con que se encontraron sus primeras inauguraciones –alguna de ella
sustituyendo en la ubicación al mismísimo Starbucks–. Hoy la cadena
cuenta con 10 locales propios y tres franquicias, a las que en breve se
sumarán cinco más, actualmente en proyecto.
Oswaldo Herrero, responsable de Expansión de Nurielle
JUNIO 2010 • Nº 162