15.04.2015 Views

Mesa 5: Pasado y presente del pensamiento de izquierda - CeDInCI

Mesa 5: Pasado y presente del pensamiento de izquierda - CeDInCI

Mesa 5: Pasado y presente del pensamiento de izquierda - CeDInCI

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

<strong>Mesa</strong> 5 — <strong>Pasado</strong> y Presente <strong><strong>de</strong>l</strong> Pensamiento <strong>de</strong> Izquierda<br />

omar acha<br />

Progreso y nacionalismo<br />

su propia <strong>de</strong>strucción pues las <strong>de</strong>sigualda<strong>de</strong>s y sufrimientos que ocasionaba hacían cada vez más factible el<br />

cambio e insoportable la persistencia <strong>de</strong> las socieda<strong>de</strong>s <strong>de</strong> clase. No abundaremos sobre este punto crucial<br />

<strong>de</strong> la filosofía marxista <strong>de</strong> la historia. Solamente digamos que para la emancipación <strong>de</strong>seada en las <strong>izquierda</strong>s<br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> siglo XX, el <strong>de</strong>sarrollo cultural, económico, tecnológico, político y social, parecían coadyuvar a la liberación<br />

final <strong>de</strong> las opresiones.<br />

El horizonte <strong>de</strong> objeto <strong>de</strong> la filosofía <strong><strong>de</strong>l</strong> progreso implícita en toda reflexión <strong>de</strong> <strong>izquierda</strong>s, se <strong>de</strong>finió en torno<br />

a los sistemas económico-sociales o modos <strong>de</strong> producción conocidos como feudalismo, capitalismo y socialismo.<br />

Así las cosas, esas etapas <strong><strong>de</strong>l</strong> <strong>de</strong>sarrollo histórico correspondían con el pasado, el <strong>presente</strong> y el futuro.<br />

El pasado era calificado casi siempre negativamente, pues el progreso implicaba por <strong>de</strong>finición su superación.<br />

El <strong>presente</strong> poseía el germen <strong><strong>de</strong>l</strong> porvenir. El futuro, aquel <strong><strong>de</strong>l</strong> socialismo, era la consumación <strong>de</strong> las potencialida<strong>de</strong>s<br />

realizadas por las reformas o por la revolución. Pero si el <strong>presente</strong> que podía ser el capitalismo era<br />

consi<strong>de</strong>rado inferior económica, política y socialmente respecto al futuro, era sin duda superior al pasado feudal.<br />

Y es que el progresismo estaba vertebrado por una ten<strong>de</strong>ncia a encontrar los rasgos que propendían al<br />

futuro. Diversos <strong>de</strong>terminismos llevaban los sistemas sociales a través <strong>de</strong> un camino hacia la superación.<br />

En la herencia <strong>de</strong> la Ilustración, sin embargo, el feudalismo era visto como menos grávido <strong>de</strong> porvenir que el<br />

capitalismo. La negatividad <strong><strong>de</strong>l</strong> pasado tenía esa cualidad <strong>de</strong> obturar las ten<strong>de</strong>ncias que con mucha mayor facilidad<br />

se encontraba en el <strong>presente</strong>. Cuando una sociedad estaba <strong>de</strong>tenida en el feudalismo, nada podía ser<br />

más coherente que aspirar a llegar al capitalismo don<strong>de</strong> las fuerzas <strong><strong>de</strong>l</strong> futuro comenzarían a cavar como el<br />

viejo topo <strong>de</strong> la revolución.<br />

El progresismo que estaba incrustado en Marx y en el marxismo, sin embargo alimentaba a la <strong>izquierda</strong> también<br />

por otras sendas. El kantismo, con su peculiar filosofía <strong>de</strong> la historia que llevaba al cosmopolitismo, dio a<br />

la social<strong>de</strong>mocracia un sustento para su pasividad ante el <strong>de</strong>sastre contemporáneo que —se suponía— <strong>de</strong><br />

todas maneras iba a realizar el plan <strong>de</strong> la naturaleza esbozada por el filósofo <strong>de</strong> Koenisberg en el opúsculo <strong>de</strong><br />

I<strong>de</strong>as para una historia universal. El recordado evolucionismo neodarwiniano cumpliría la misma función.<br />

Sólo que en clave “científica”.<br />

Pero el siglo XX fue uno marcado a fuego por el nacionalismo y las <strong>izquierda</strong>s no se iban liberar <strong>de</strong> sus interpelaciones<br />

i<strong>de</strong>ntitarias. Hobsbawm ha mostrado <strong>de</strong> manera <strong>de</strong>finitiva que las i<strong>de</strong>ologías nacionalistas fueron<br />

construcciones recientes, que adquirieron el tono ligado al lenguaje y a la etnicidad solamente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la<br />

Revolución Francesa.<br />

La i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> nación posee una relación nada simple con la temporalidad <strong><strong>de</strong>l</strong> progresismo. Si una nación es tal<br />

cosa, sus orígenes, y no su futuro, es lo que <strong>de</strong>termina sus cualida<strong>de</strong>s. Para hallar el estado puro <strong>de</strong> la nacionalidad<br />

<strong>de</strong>bemos remitirnos al tiempo primigenio don<strong>de</strong> ningún peligro acechaba con oprimirla ni violarla. El<br />

romanticismo fue el discurso general <strong>de</strong> las i<strong>de</strong>ologías nacionalistas. Para los sectores conservadores, la nación<br />

estaba siempre en la potencia <strong><strong>de</strong>l</strong> pasado. El revisionismo histórico conservador <strong>de</strong> los hermanos Irazusta<br />

o <strong>de</strong> Ernesto Palacio, era consistente cuando <strong>de</strong>seaba retornar a los tiempos nada dialécticos don<strong>de</strong> Rosas<br />

sabía imponer su superioridad sobre el gauchaje. La síntesis <strong>de</strong> hispanismo, catolicismo y virilidad que hallaban<br />

en el Restaurador <strong>de</strong> las Leyes, constituía el medio idóneo para <strong>de</strong>clarar la superioridad <strong><strong>de</strong>l</strong> pasado respecto<br />

a un futuro <strong>de</strong> entrega al extranjero y <strong>de</strong>sor<strong>de</strong>n social interno.<br />

Pero las <strong>izquierda</strong>s no fueron menos sensibles a la interpelación nacionalista. Frente a su ten<strong>de</strong>ncia a incluir<br />

rasgos <strong><strong>de</strong>l</strong> progresismo en sus representaciones históricas, la tensión <strong>de</strong>bía hacerse por <strong>de</strong>más evi<strong>de</strong>nte. El<br />

progresismo otea las promesas <strong><strong>de</strong>l</strong> porvenir, el nacionalismo añora la autenticidad <strong>de</strong> lo ido. ¿Cómo podía<br />

conciliarse esta tensión que cruzó el sentido <strong><strong>de</strong>l</strong> tiempo en las imaginaciones históricas <strong>de</strong> la <strong>izquierda</strong>? La<br />

respuesta acaso provenga <strong>de</strong> una región menos teórica <strong>de</strong> la realidad. Es que fue una tensión que cribaba la<br />

textura misma <strong>de</strong> la política. Si los juramentos y <strong>de</strong>claraciones internacionalistas fueron <strong>de</strong> rigor antes <strong>de</strong><br />

1914, los supuestos nacionalistas no eran por ello menos evi<strong>de</strong>ntes en las organizaciones e intelectuales <strong>de</strong><br />

las <strong>izquierda</strong>s. La conjunción entre progresismo y nacionalismo posibilitó que la social<strong>de</strong>mocracia alemana<br />

alimentara la i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> que en esa organización social a<strong><strong>de</strong>l</strong>antada que era la heredada <strong>de</strong> la exclusión final <strong>de</strong><br />

Austria a favor <strong>de</strong> la hegemonía prusiana en 1871, la evolución económica y social llevaría a la lenta pero inexorable<br />

imposición <strong><strong>de</strong>l</strong> socialismo. No pue<strong>de</strong> sorpren<strong>de</strong>rnos que la sujeción colonialista <strong>de</strong> sectores “atrasados”<br />

<strong><strong>de</strong>l</strong> planeta hallará una justificación en sus filas.<br />

- 43 -

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!