30.07.2015 Views

En Peligro - Tu hijo en un mundo hostil - Plough

En Peligro - Tu hijo en un mundo hostil - Plough

En Peligro - Tu hijo en un mundo hostil - Plough

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Despegarseflote. Servir a los demás no es cómodo, pero da <strong>un</strong> propósito a la vida y teobliga a p<strong>en</strong>sar <strong>en</strong> otros.O bi<strong>en</strong> te decides a vivir para los demás o vas a terminar consumido por timismo. Una vez que empieces a dar de ti, verás que todos tus anhelos seránsatisfechos.A muchos niños y adolesc<strong>en</strong>tes se les hace s<strong>en</strong>tir que son inútiles, que nadati<strong>en</strong><strong>en</strong> que ofrecer. Pero, si les diéramos las oport<strong>un</strong>idades adecuadas, estoyconv<strong>en</strong>cido de que, como Dave, veríamos cuántos anhelan hacer algo más quesalvar el propio pellejo. No hay jov<strong>en</strong> adulto, sea de donde sea y a despecho delas actitudes y preocupaciones que ost<strong>en</strong>te, que no quisiera ayudar a sus congéneres,cambiar las cosas <strong>en</strong> su alrededor y transformar el m<strong>un</strong>do.Al ofrecer estas oport<strong>un</strong>idades a nuestros <strong>hijo</strong>s, les ayudaremos a ext<strong>en</strong>dersemás allá de su pequeño yo, y les daremos la certeza de que no sólo ti<strong>en</strong><strong>en</strong> algoque dar, sino que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> la obligación de darlo. Y con el tiempo, compr<strong>en</strong>deránque la preg<strong>un</strong>ta a plantearse no es, <strong>en</strong> las palabras de Viktor Frankl: “¿Cuáles el s<strong>en</strong>tido de mi vida?”, sino: “¿Qué exige la vida de mí?” Frankl añade:También puede expresarse de otra manera… La vida nos plantea dilemas,y a nosotros nos corresponde asumir la responsabilidad de contestar estaspreg<strong>un</strong>tas. Podemos responder a la vida únicam<strong>en</strong>te si nos hacemos responsablesde nuestra propia vida.Criar <strong>hijo</strong>s a conci<strong>en</strong>cia, pero dejarlos ir; protegerlos, pero al<strong>en</strong>tar su espíritude sacrificio; guiarlos, pero prepararlos para nadar contra la corri<strong>en</strong>te —todasestas apar<strong>en</strong>tes paradojas <strong>en</strong> la educación del niño se ilustran <strong>en</strong> la sigui<strong>en</strong>tehistoria.<strong>En</strong> 1943, Uwe Holmer era <strong>un</strong> adolesc<strong>en</strong>te vivaz de catorce años, miembroactivo de la Juv<strong>en</strong>tud Hitleriana de su localidad. Un día su madre <strong>en</strong>contró <strong>en</strong>su cuarto <strong>un</strong> número de la revista Der schwarze Korps de la SS (la policía militardel partido nazi). Cuando Uwe llegó a casa, su madre le habló muy seriam<strong>en</strong>tey le pidió que n<strong>un</strong>ca se incorporara a la SS. “Pero mamá, son los soldadosmás fuertes. Pelean hasta la muerte”, repuso Uwe. “Sí”, le contestó la madre,<strong>En</strong> <strong>Peligro</strong>

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!