City of Heavenly Fire ( PDFDrive.com )

Cassandra Clare
City Of Heavenly Fire
El demonio que te liberó. Así que Magnus no había mencionado que era
su padre, no es que Clary lo culpara. Ella no quería revelar su secreto
tampoco. —No voy a decirle a Simon nada, ¿está bien? Sólo quiero oír
su voz. Necesito saber que está bien.
Jia suspiró y le tendió el teléfono. Clary lo tomó, preguntándose cómo
marcaba fuera de Idris. ¿Cómo pagan sus facturas teléfonicas?, decidió
hacer caso omiso y marcó, como si estuviera en Brooklyn. Si eso no
funcionaba, podría pedir ayuda.
Para su sorpresa, el teléfono sonó, y fue descolgado casi de inmediato,
la voz familiar de la madre de Simon haciendo eco en la línea. —
¿Hola?
— Hola —el receptor casi se deslizó en la mano de Clary; la palma
de su mano estaba humedecida de sudor — ¿Está Simon por ahí?
— ¿Qué? Oh, sí, él está en su habitación —dijo Elaine. — ¿Puedo
decirle quién está llamando?
Clary cerró los ojos. — Es Clary.
Se produjo un breve silencio, y luego Elaine dijo: —Lo siento, ¿quién?.
— Clary Fray. —probó sabor metálico amargo en la parte posterior
de su garganta. —Yo… Yo voy al St. Xavier, se trata de nuestros
deberes de Inglés.
— ¡Oh! Bueno, está bien, entonces —dijo Elaine. —Voy a ir a
buscarlo. — Ella dejó el teléfono, y Clary esperó, esperó a la
mujer que había arrojado a Simon fuera de su casa y lo llamó un
monstruo, lo había dejado vomitar sangre sobre sus rodillas en la
cuneta, y ahora iba a recoger una llamada de teléfono como si
fuera un adolescente normal.
No fue su culpa. Era la marca de Caín, que actuaba sobre ella sin su
conocimiento, convirtiendo a Simon en un vagabundo, llevándolo lejos
Amar es destruir y ser amado es ser destruido