City of Heavenly Fire ( PDFDrive.com )

Cassandra Clare
City Of Heavenly Fire
Ella tenía su mejilla contra la pechera de la camisa de Jace, la tela
arrugada y suave bajo la piel. Su mano jugaba distraídamente con los
rizos que se le habían caído del moño, sus dedos trazan la parte
posterior de su cuello. No podía dejar de recordar un sueño que había
tenido hace mucho tiempo, en el que había estado bailando con Jace en
el Salón de los Acuerdos.
Había estado tan alejado en ese entonces, por lo que algunas veces era
frío; Le asombraba a veces ahora cuando ella lo miraba, porque se
trataba del mismo Jace. El Jace al que ella le ayudó a ser, ese yo que
había dicho. Jace lucia mucho mejor.
Pero él no era el único que había cambiado; ella había cambiado
demasiado. Ella abrió la boca para decirle algo, cuando sintió un golpe
en el hombro. Se volvió y vio a su madre, sonriéndole a los dos.
"Jace", dijo Jocelyn. "¿Si puedo pedirte un favor?"
Jace y Clary habían dejado de bailar; nadie dijo nada. A Jocelyn le
gustaba Jace mucho mas de lo que le había gustado en los últimos seis
meses; ella lo había logrado, Clary se atrevería a decir, a encariñarse
con él, pero ella todavía no era estaba entusiasmada con el Cazador de
Sombras novio de Clary.
"Lily está cansada de tocar, pero todo el mundo está disfrutando del
piano, y tu tocas ¿no? Clary me dijo lo talentoso que eres. ¿Quieres
tocar para nosotros?"
Jace le dio una mirada a Clary, tan rápida que ella lo vio sólo porque
ella lo conocía lo suficientemente bien como para mirar. Tenía modales,
aunque, exquisitos, cuando eligió usarlos. Sonrió a Jocelyn como un
ángel, y luego se acercó al piano. Un momento después, los acordes de
la música clásica llenaron la carpa.
Amar es destruir y ser amado es ser destruido