21.08.2020 Views

City of Heavenly Fire ( PDFDrive.com )

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Cassandra Clare

City Of Heavenly Fire

gritaron; Tiberius aceptó la noticia de la partida de Helen con los ojos

abiertos confundido, como si él no supiera que pasaba o como

esperaran que reaccionara. Al final él se despidió sosteniendo su mano

y solemnemente le deseó buena suerte, como si ella fuera un colega

partiendo a un viaje de negocio. Ella se echó a llorar. ―Oh, Ty,‖ dijo

ella, y él se apartó, mirando horrorizado.

Helen se arodilló ahora, quedando casi al nivel de los ojos con Jules

que estaba sentado en la cama. ―Recuerda lo que te dije, ok?‖

―Estaremos bien,‖ Julian repitió.

Helen apretó su mano. ―Odio dejarte,‖ dijo ella. ―Cuidaría de ti si

pudiera. Lo sabes, cierto? Me encargaré del Instituto. Los amo

demasiado.‖

Julian se retorció de la manera que solo un niño de doce años se

retuerce cuando escucha la palabra ―amor.‖

―Lo sé,‖ consiguió decir.

―La única razón por la que me puedo ir es el estar segura que los dejo

en buenas manos,‖ dijo ella, sus ojos clavados en los de él.

―¿Te refieres a tío Arthur?‖

―Me refiero a ti,‖ dijo ella, y los ojos de Jules se abrieron mucho. ―Sé

que es mucho pedir,‖ añadió. ―Pero también sé que puedo depender

en ti. Sé que puedes ayudar a Dru con sus pesadillas, y cuidar a Livia y

Tavvy, y tal vez hasta tío Arthur puede hacer eso también. Él es un

hombre bastante agradable. Distraído, pero parece querer tratar..‖ Su

voz se fue apagando. ―Pero Ty es…‖ Suspira. ―Ty es especial. Él…

traduce el mundo de una forma diferente a nosotros. No todos pueden

hablar su idioma, pero tú puedes. Cuídalo por mí, está bien? Él será

algo asombroso. Solo debemos mantener a la Clave que comprenda

Amar es destruir y ser amado es ser destruido

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!