Aqui-estamos-Ninas-ninos-y-adolescentes-afroperuanos
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40 | ¡Aquí <strong>estamos</strong>! Niñas, niños y <strong>adolescentes</strong> <strong>afroperuanos</strong><br />
medida, es que muchas veces el Seguro de Salud Integral (SIS) no cubre los gastos<br />
de los medicamentos, razón por la cual deben comprarlos ellos mismos.<br />
c) Calidad: se identifica tres dificultades: 1) la atención en los establecimientos de salud<br />
de las localidades no es continua (por ejemplo, de 8 a.m. a 7 p.m.), dificultando que los<br />
pobladores tengan acceso a atención médica o tratamientos; 2) no hay una atención<br />
oportuna de los usuarios por el limitado número de personal médico que brinda<br />
servicios en los establecimientos de salud (“para tener cita tienes que esperar un<br />
mes”); 24 3) los médicos no asisten o llegan tarde a las consultas. Por estas dificultades<br />
prefieren recurrir a médicos particulares, familiares y/o conocidos que sepan algo sobre<br />
salud (no necesariamente médicos profesionales, sino por ejemplo, enfermeras). En<br />
menor medida, prefieren dejar sin atención médica a la niña, el niño o adolescente.<br />
Participante: Hasta las 8 de la noche atiende [la posta] o hasta las 7 (…) porque<br />
ahora ya no hay nadie, <strong>estamos</strong> desamparados.<br />
Entrevistador: ¿Cuando hay una emergencia?<br />
Participante: A Chincha, porque está retirado. (…). Solamente, tenemos (a)<br />
la señora Clemencia Rebata, que ella nos salva a nosotras. La mayoría de las<br />
personas le tienen bastante confianza, por lo que es cesante de salud, es una<br />
técnica enfermera y ella es la que presta auxilio a todos.<br />
(Entrevista a docente, El Carmen)<br />
d) En la accesibilidad para la atención médica se reportan dos dificultades: 1) accesibilidad<br />
económica, dado que muchos padres y madres prefieren llevar a sus hijas e hijos a<br />
doctores particulares, incrementando sus gastos en atención y medicamentos; 2)<br />
desde la percepción de algunos padres y madres <strong>afroperuanos</strong> -principalmente en<br />
Yapatera y El Carmen- existiría una situación de discriminación por parte del personal<br />
de salud, basada en el color de la piel y en la condición de pobreza.<br />
“(…) sería mentir decir que tratan bien porque eso no pasa, tienes que tener<br />
suerte para encontrar un doctor o enfermera buena, mayormente las malas<br />
gracias son las enfermeras (…) no les importaba que estuviera con mi niña<br />
mal. Como estaba con mi cuñada, ella les dijo ‘señorita, por favor, ¿hasta qué<br />
hora la vamos a esperar?’ y de mala gana cogió a mi hijita para pesarla, (…) por<br />
racismo también (…) tratan así a todos”.<br />
(Entrevista a madre, El Carmen)<br />
24 El problema de escasez de profesionales de la salud es muy similar a lo que sucede con otros grupos poblacionales,<br />
específicamente para el caso de la niñez indígena. De acuerdo con el Estado de la Niñez Indígena en el Perú 2010 del<br />
INEI y de UNICEF (Benavides et al, 2011), para este grupo étnico el número de centros de salud que deben contar con<br />
médicos pediatras y ginecólogos, varía entre uno por cada 73.9 mil habitantes (Carabaya, Puno) y uno por cada 9.2 mil<br />
(Cotabambas, Apurímac).