Aqui-estamos-Ninas-ninos-y-adolescentes-afroperuanos
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56 | ¡Aquí <strong>estamos</strong>! Niñas, niños y <strong>adolescentes</strong> <strong>afroperuanos</strong><br />
b) Pocos ingresos económicos de las familias, lo cual se enmarca en una problemática<br />
mayor: la situación de pobreza general de la localidad en la que viven. Esto dificulta<br />
que los padres de familia puedan pagar los estudios técnicos o universitarios de uno<br />
o más hijos (en este último caso es aún más complicado), dado que los ingresos<br />
económicos solo cubren gastos de necesidades básicas. Esto también ha originado<br />
que muchos <strong>adolescentes</strong>, promovidos por sus padres, busquen trabajar apenas<br />
finalizan la escuela, para aportar económicamente en sus hogares.<br />
“Yo quiero estudiar ciencias de la comunicación, quiero un trabajo alto, a lo<br />
máximo que pueda, pero va a depender de si tus padres te apoyan, porque lo<br />
que más te limita son los medios económicos (…)”.<br />
(Grupo focal con <strong>adolescentes</strong>, Villa María del Triunfo)<br />
“(…) se rige por la economía y no tienen una solvente; antes, los parceleros<br />
tenían la posibilidad de poner a sus hijos en la universidad, pero ahora se han<br />
endeudado con los bancos. (…) Si sus chacras no han producido, no tienen<br />
cómo pagar los estudios superiores a sus hijos. El otro punto, es que tienen<br />
ocho hijos y no pueden darles estudios a todos. (…) Uno que otro, son pocos,<br />
contados [los que acceden a secundaria], mayormente terminan secundaria y<br />
se ponen a trabajar o se dedican al campo, ayudan a sus padres (…)”.<br />
(Entrevista a Juez de Paz, El Carmen)<br />
c) Escasa oferta educativa técnica o universitaria, en cantidad y calidad, en las<br />
localidades en las que crecen las y los <strong>adolescentes</strong>, razón por la cual deben migrar<br />
a ciudades más grandes, incrementándose el gasto para estudiar y dificultándose el<br />
acceso a la educación técnica o universitaria.<br />
“(…) otro asunto es que a veces los padres no pueden mandar a estudiar a los<br />
chicos a Piura porque no les alcanza para el pasaje diario. Si se quedan en un<br />
cuarto tienen que pagarle pensión y alquiler, y no hay de dónde. La vida acá en<br />
el campo es difícil, (…) si se hiciera un Taller o un Instituto sería bonito para que<br />
los jóvenes y señoritas que salen del colegio puedan ir a estudiar”.<br />
(Entrevista a presidenta del comedor popular, Yapatera)<br />
En el caso de las características personales muchos entrevistados señalaron las limitadas aspiraciones<br />
profesionales de las y los <strong>adolescentes</strong> <strong>afroperuanos</strong>. Quienes más señalaron ello fueron los docentes y<br />
los padres de familia quienes explicaron que la educación técnica o universitaria no es una posibilidad<br />
para ellas y ellos, porque no les interesa estudiar, y que prefieren dedicarse a jugar fútbol.<br />
“(…) Sí, pero eso no se ve mucho acá [motivación por estudiar], de un 100%, el<br />
60% quiere estudiar y el otro 40% no, quiere la pelotita, el fútbol”.<br />
(Entrevista a madre, El Carmen)