Planes Regionales - Universidad Tecnológica de Panamá

crecimiento del 6.5%), respectivamente. Este crecimiento poblacional generaría
una población de jóvenes, para Herrera y Los Santos, entre 15 y 24 años de
16,696 y 12,288 habitantes, respectivamente.
El rango de edades de 15 a 19 años, los cuales representarían nuestros clientes
potenciales; revela una población de 9,392 habitantes para Herrera y 6,821 para
la provincia de Los Santos, haciendo un total de 16,213, dentro del rango
señalado. Por tanto, si consideramos que aproximadamente el 78.4% de esa
población se encuentra asistiendo a los grados X, XI y XII (segundo ciclo), la
población potencial en los próximos 5 años estaría representada en 12,711
habitantes, que representa una estimación de los potenciales interesados en
estudiar en alguna institución de educación superior.
El análisis anterior con relación a los clientes potenciales de la educación
superior en la región de Azuero y los datos estadísticos del Sistema de Ingreso
Universitario de la UTP-Azuero (SIU) en los últimos cinco (5) años, permiten
señalar que el promedio de inscritos (los que prefieren este centro de educación
superior), es de 560 estudiantes. Esto representa un aproximado de 22% de la
población potencial si se considera que aproximadamente el 78% de esa
población se encuentra asistiendo a los grados X, XI y XII (2,527 habitantes por
año de los 12,635 de la población de segundo ciclo), de la cual sólo 324 (13%)
aprueban el examen de admisión (PAA).
Estas cifras indican que la Universidad Tecnológica de Panamá en Azuero
enfrenta el reto de incrementar su nivel de matrícula, con un crecimiento
poblacional muy bajo.
La costa azuerense, forma parte de la región de la Bahía de Panamá, que posee
la mayor cobertura de manglares. Es importante resaltar, que específicamente
en las costas de la Provincia de Los Santos, bellas playas de aguas cristalinas
han generado gran cantidad de inversión extranjera, en construcciones de
viviendas de playa; teniendo como consecuencia un incremento en las
transacciones y valores de bienes raíces, desplazando al mismo tiempo las
actividades tradicionales de pesca artesanal, la agricultura y ganadería en la
región costanera, pero al mismo tiempo promoviendo nuevas actividades
especialmente el turismo y el comercio.
El auge en la construcción ha alcanzado las principales ciudades de estas
provincias, traduciéndose en barriadas residenciales, centros comerciales y
bancos, entre otras.
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