09.05.2013 Views

La figura histórica de Jesús

La figura histórica de Jesús

La figura histórica de Jesús

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

50<br />

LA FIGURA HISTÓRICA DE JESÚS<br />

en el <strong>de</strong>sierto <strong>de</strong> Ju<strong>de</strong>a y les prometieron "señales <strong>de</strong> liberación", o sea, la<br />

esperanza <strong>de</strong> la intervención divina. Todos fueron reducidos al silencio por<br />

Roma. 28<br />

Cuando la rebelión finalmente estalló en el 66, es casi seguro que<br />

muchos se unieron a ella porque creían que Dios estaba dispuesto a liberarlos.<br />

El tumulto y el <strong>de</strong>rramamiento <strong>de</strong> sangre que entonces se produjeron<br />

fueron lo bastante serios para forzar al legado <strong>de</strong> Siria a marchar sobre<br />

Jerusalén. Inexplicablemente, levantó el asedio, dio media vuelta y se<br />

retiró, y sus tropas sufrieron una emboscada. Esto <strong>de</strong>bió <strong>de</strong> parecerles a<br />

muchos una señal <strong>de</strong>l cielo. 29 Pocos judíos, por no <strong>de</strong>cir ninguno, pensarían<br />

que podían rebelarse con éxito con sus solas fuerzas. Sin embargo,<br />

Dios los había liberado en el pasado y, cuando estuviera dispuesto, volvería<br />

a hacerlo (por ejemplo, Vida, 290). Muchos estaban <strong>de</strong>seosos <strong>de</strong> empuñar<br />

las armas cuando los signos <strong>de</strong> los tiempos fueran lo suficientemente<br />

claros. El resultado sería (pensaban) que Dios intervendría y les daría la<br />

victoria.<br />

Tales esperanzas <strong>de</strong> asistencia divina no requerían la expectación <strong>de</strong> un<br />

"Mesías", un <strong>de</strong>scendiente <strong>de</strong> David alerta y dispuesto a convertirse en<br />

rey. 30 Ni siquiera requerían la expectación <strong>de</strong> que el Reino final y <strong>de</strong>finitivo<br />

<strong>de</strong> Dios estuviera a punto <strong>de</strong> establecerse. Por tanto, no po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>cir<br />

que las esperanzas judías <strong>de</strong> libertad fueran necesariamente "mesiánicas",<br />

ni siquiera, más en general, escatológicas. 31 <strong>La</strong> rebelión asmonea contra el<br />

imperio sirio en el siglo II AEC había tenido éxito por la gracia <strong>de</strong> Dios,<br />

pero los judíos no pensaban que el Reino <strong>de</strong> Dios había llegado. No po<strong>de</strong>mos<br />

saber cuántos <strong>de</strong> los judíos que se unieron a las insurrecciones contra<br />

Roma, o que siguieron a un profeta, pensaban que el Reino final estaba a<br />

punto <strong>de</strong> llegar. Es correcto <strong>de</strong>cir, sin embargo, que todos esperaban la<br />

asistencia <strong>de</strong> Dios. Los judíos pensaban que Dios controlaba la historia y<br />

<strong>de</strong>cidía el resultado <strong>de</strong> todos los acontecimientos importantes. <strong>La</strong> situación<br />

cambiaría <strong>de</strong>cisivamente sólo si Dios intervenía. Algunos, quizás sólo<br />

28 Guerra 2,258-263; Antig. 20,97-99, 167-172. Teudas y el Egipcio son<br />

mencionados en Hch: 5,36; 21,38.<br />

29 Guerra 2,499-555. Reprospectivamente, Josefo pensaba que Dios había<br />

provocado estos acontecimientos porque había <strong>de</strong>cidido abandonar su santuario<br />

y permitir su <strong>de</strong>strucción (539). Es <strong>de</strong>cir, la <strong>de</strong>rrota <strong>de</strong> Cestio envalentonó a los<br />

judíos, que <strong>de</strong>cidieron empren<strong>de</strong>r una guerra a gran escala; esto, a su vez, ocasionó<br />

su <strong>de</strong>strucción. En aquel momento, sin embargo, la victoria judía <strong>de</strong>bió <strong>de</strong><br />

ser consi<strong>de</strong>rada como un signo divino <strong>de</strong> que los judíos vencerían.<br />

30 Véanse infra pp. 112s.<br />

31 Sobre escatología, véanse infra pp. 116, 205s.<br />

EL CONTEXTO POLÍTICO<br />

unos pocos, pensaban que en un futuro cercano establecería su propio<br />

reino en la tierra. 32<br />

Este capítulo ha tratado sobre la historia política <strong>de</strong> Palestina antes y<br />

durante la época <strong>de</strong> <strong>Jesús</strong>, y especialmente sobre los diferentes or<strong>de</strong>namientos<br />

políticos y judiciales <strong>de</strong> Galilea y Ju<strong>de</strong>a en los años veinte y treinta<br />

<strong>de</strong> nuestra era. Hemos abarcado mucho terreno en poco espacio; como<br />

pasa siempre que se dan resúmenes políticos breves, el lector se ha encontrado<br />

con un montón <strong>de</strong> datos y nombres. Ofrezco a continuación una<br />

lista <strong>de</strong> los puntos más oportunos para enten<strong>de</strong>r a <strong>Jesús</strong>.<br />

1. En realidad, Roma no gobernaba Palestina en la concreción<br />

<strong>de</strong>l día a día. Gobernaba Palestina indirectamente, bien a través<br />

<strong>de</strong> un rey, etnarca o tetrarca cliente (títere), bien a través<br />

<strong>de</strong> un gobernador permanente, quien a su vez utilizaba a los<br />

aristócratas locales, especialmente al sumo sacerdote.<br />

2. En Galilea, durante los años en que vivió <strong>Jesús</strong>, Antipas fue un<br />

tetrarca cliente semiin<strong>de</strong>pendiente. Tuvo tanta in<strong>de</strong>pen<strong>de</strong>ncia<br />

como su padre, Hero<strong>de</strong>s el Gran<strong>de</strong>, aunque al parecer fue más<br />

blando y menos implacable. <strong>La</strong>s tropas eran suyas, los impuestos<br />

eran suyos (aunque pagaba tributo a Roma), los gobernadores<br />

<strong>de</strong> distrito eran los que él <strong>de</strong>signaba, y los magistrados<br />

locales <strong>de</strong>sempeñaban sus funciones a su gusto.<br />

3. En los años veinte y treinta, Ju<strong>de</strong>a estuvo bajo el sistema imperial<br />

alternativo: un gobernador romano (el prefecto) y un<br />

reducido número <strong>de</strong> soldados residían <strong>de</strong> forma permanente<br />

en Palestina, aunque por lo general se mantenían fuera <strong>de</strong><br />

Jerusalén, la capital, porque los judíos era muy sensibles en lo<br />

tocante a las ofensas contra su religión en la ciudad santa. El<br />

control <strong>de</strong> lo cotidiano estaba en manos <strong>de</strong>l sumo sacerdote,<br />

quien tenía consejeros extraoficiales y también un pequeño<br />

consejo oficial. <strong>La</strong> mayoría <strong>de</strong> sus consejeros eran aristócratas,<br />

y muchos eran sacerdotes aristócratas.<br />

4. <strong>La</strong> Palestina judía no estaba al bor<strong>de</strong> <strong>de</strong> la rebelión cuando fue<br />

ejecutado <strong>Jesús</strong>. Había habido tensión entre los judíos, especialmente<br />

los jerosolimitanos, y Pilato porque éste paseó los<br />

estandartes romanos por la ciudad. En otra ocasión (que no<br />

hemos analizado antes) también se apropió <strong>de</strong> dinero sagrado<br />

Sobre la gama <strong>de</strong> distintas esperanzas para el futuro, véase P&B, cap. 14.<br />

51

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!