Nuevas tecnologías y desarrollo sostenible en la pesca - UGT

Nuevas tecnologías y desarrollo sostenible en la pesca
De acuerdo con la normativa comunitaria y las propias disposiciones nacionales, el Sistema de
Localización de Buques Pesqueros fue establecido para la flota española en el año 2000 y para ello se
puso en marcha el Centro de Seguimiento de Pesca dependiente de la Secretaría General de Pesca
Marítima, con una inversión inicial de 300 millones de euros. Este centro, integrado en la Subdirección
General de Inspección Pesquera, funciona de forma ininterrumpida y de forma automática veinticuatro
horas al día.
El sistema está formado, además de por el Centro de Seguimiento de Pesca, por los equipos instalados
en cada barco, las denominadas "cajas azules", así como por sistemas de comunicación y posicionamiento
donde destaca el Global Position System (GPS), que emite permanentemente señales a
los buques para determinar su posición, rumbo, velocidad y la transmisión de esos datos para las comunicaciones
por satélite con el sistema Inmarsat-C.
Para la puesta en marcha de este sistema ha sido precisa, en primer lugar, la instalación de las llamadas
"cajas azules" en cada barco. El coste de las mismas ha sido de unos 3.600 unidad, importe abonado
con fondos comunitarios. Estos equipos se han construido de acuerdo con las condiciones técnicas
establecidas en la normativa nacional y se hallan sellados para evitar cualquier manipulación de
los mismos. Básicamente contienen una unidad de posicionamiento y una estación de transmisión-recepción
vía satélite, así como otros dispositivos para almacenar y proteger datos.
Se ha pretendido que las "cajas azules" reúnan las máximas condiciones de seguridad para su funcionamiento.
Están protegidas del medioambiente marino, deben tener dos fuentes de alimentación, una
de ellas con las baterías de emergencias del buque, almacenan en su memoria interna datos cada 10
minutos sobre la posición del barco durante seis meses y disponen de botones para indicar la actividad
del barco en cada momento, ya se halle en pesca o en navegación. Las posiciones que se envíen
deben tener un margen de error menor a los 100 metros y el tiempo máximo entre el envío de un
mensaje y su recepción en el Centro de Seguimiento de Pesca será de diez minutos.
Fuentes de la Administración Pesquera Española consideran muy importante para el desarrollo de una
política pesquera responsable en todo el mundo que el sistema funcionara para todo tipo de barcos,
ya se hallen en aguas de terceros países, ya en caladeros bajo control de organismos regionales de
pesca, y sea cual sea su bandera. De esta forma se lograría el desarrollo de unas pesquerías más responsables,
primero al sentirse vigilados en su actividad y, segundo, ante la posibilidad de aplicar sanciones
a las pesquerías irregulares.
Con el sistema establecido a partir de los datos sobre los derechos o posibilidades de pesca de cada
barco, se conoce permanentemente la ruta seguida por cada embarcación. Se sabe la velocidad del
barco, y a partir de ahí, es posible conocer si se halla navegando o pescando. Cuando la velocidad se
halla por debajo de los cuatro nudos. Lo más probable es que la embarcación se halle en actividad
pesquera. Mediante los datos proporcionados por las "cajas azules" se sabe en cada momento la ubicación
de un barco y ver si se halla en la zona que le corresponde.
La información disponible mediante este sistema se puede emplear, y de hecho se hace, para la apertura
de expedientes sancionadores en el caso de una infracción, pero también se emplea para tomar
medidas preventivas y, en muchos casos, para avisos. Cuando se considera por los datos manejados
en pantalla que un barco se halla desarrollando una actividad ilegal, por ejemplo pesquería fuera de su
caladero, inicialmente se le da un mensaje de advertencia. Si el barco no atiende a la llamada, se pasa
a una segunda fase consistente en la recopilación de esa información por si la misma da lugar a la apertura
de un expediente de cara a una sanción.
Según los responsables del Centro, en líneas generales, los barcos españoles que se hallan bajo este
sistema de control cumplen con las reglas de juego que tienen marcadas para el desarrollo de su actividad
pesquera y atienden igualmente las llamadas de advertencia cuando se hallan en un lugar prohibido.
El objetivo sería que lo que se hace con estos 1.400 barcos, se pudiera realizar con todas las
flotas que faenan en el mundo.
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