Hacia Un Impacto Triple - UNDP-UNEP Poverty-Environment Initiative

2.3 Ciclo de vida
Debido a que los procesos de consumo y producción están
estrechamente vinculados y debido a que la complejidad de
la interacción va en aumento y cada vez hay más cadenas
de valor globalizadas y desagrupadas, la observación de una
etapa del proceso de consumo y producción no es suficiente
para poder incrementar la sostenibilidad. En cambio, es
necesario tomar en consideración el ciclo de vida completo
de un producto o servicio. El ciclo de vida comienza con la
extracción de las materias primas que luego se producen, se
embalan, se transportan, se utilizan y finalmente se reciclan, se
reutilizan o se desechan (ver la ilustración del ciclo de vida en
la Figura 6 que se muestra a continuación).
Un enfoque centrado en el ciclo de vida permite comprender
el modo en que las decisiones influyen sobre lo que sucede
en cada uno de los puntos del ciclo a fin de equilibrar las
compensaciones y causar un impacto positivo sobre la
economía, el medioambiente y la sociedad. Este modo de
pensar ayuda a reconocer la forma en que las acciones
y las decisiones individuales son una parte de un sistema
completo. En términos generales, el pensamiento centrado
en el ciclo de vida puede promover un índice de consumo
y producción más sostenible y un uso más eficiente de
nuestros limitados recursos financieros y naturales. Permite
incrementar el valor creado mediante la optimización de los
resultados y la obtención de mayores beneficios del tiempo,
el dinero y los materiales que utilizamos (PNUMA, 2004).
Para un emprendimiento de negocios, el ciclo de vida de
un producto se refleja en gran medida en su cadena de
valor. En última instancia, la creación de valor se produce
cuando se usa el producto. Para llegar a esa etapa, se
necesita una cadena de actividades completa, desde la
extracción de la materia prima hasta la producción y la
distribución. Generalmente, la etapa posterior al uso de un
producto no se considera parte de la cadena de valor ya
que, tradicionalmente, el producto se desechaba sin ningún
agregado de valor. Por consiguiente, casi nunca se tomaban
en consideración los costos sociales de la disposición. Eso
está cambiando, ya que cada vez más compañías toman
conciencia de que la incorporación de la etapa de fin de la
vida útil en la generación de valor mediante el reciclaje y la
reutilización puede producir ahorros. Un emprendimiento
puede situarse en cualquier etapa del ciclo de vida o
incorporar varias etapas en sus actividades de generación
de valor. Además, todos los emprendimientos interactúan
con otros participantes de la cadena de valor, como los
proveedores, los distribuidores, los vendedores y los clientes.
La perspectiva del ciclo de vida siempre toma en
consideración todas las etapas de la vida de un producto o
servicio, aunque no todas pueden considerarse parte de la
cadena de valor. Mantener una perspectiva centrada en el
ciclo de vida es útil para garantizar que todos los impactos
de un emprendimiento sostenible se reflejen adecuadamente
en el análisis.
Producción
Extracción de
materia prima
Residuos
Insumos
Insumos
Residuos
Recursos
naturales
Insumos
Residuos
Embalaje y
distribución
Reciclaje
Residuos
Insumos
Insumos
Residuos
Din de la
vida útil
Reuso
Uso del
producto
Figura 5: Etapas del ciclo de vida de un producto
Fuente: Adaptado de PNUMA, 2005
Introducción / Capítulo 2: Uso De Una Perspectiva Sistémica 23