You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
55<br />
Otra mañana minutos antes <strong>de</strong> la ocho horas, en la calle don<strong>de</strong> el vecino le<br />
ponchó dos llantas al auto que invadía su cochera, un transeúnte con navaja<br />
en mano ralló la carrocería <strong>de</strong> una camioneta que se encontraba estacionada<br />
frente a ese domicilio, ocupando la mitad <strong>de</strong> la banqueta.<br />
Ricardo fue testigo <strong>de</strong> que el vecino afectado, salió a reclamarle el daño al<br />
agresor, con estas palabras.<br />
-Piche ojete, porque rallaste mi camioneta-.<br />
Su respuesta fue ésta.<br />
-Para que aprendas, cabrón. Y tú también respetes. El otro día le ponchaste<br />
dos llantas a mi carro por bloquear tu cochera y mira lo que haces: pones tu<br />
camioneta a media banqueta y no <strong>de</strong>jas pasar a la gente. Así que si no te<br />
gustó, aquí te espero y nos rompemos el hocico…-.<br />
Otro inci<strong>de</strong>nte recordado por Ricardo vino a su mente.<br />
Los hechos ocurrieron en el estacionamiento <strong>de</strong> una plaza comercial. Al<br />
circular sin precaución, un señor estuvo a punto <strong>de</strong> atropellar con su coche a<br />
otro hombre <strong>de</strong> avanzada edad.<br />
Este último le gritó. -fíjate pen<strong>de</strong>jo-.<br />
El agraviado por las palabras <strong>de</strong>l anciano bajó con un tubo <strong>de</strong> su automóvil y<br />
le golpeó la cabeza. Enseguida, los familiares <strong>de</strong>l agredido tomaron <strong>de</strong>squite.