Un Obsequio de Amor Corrección Final

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nuestra verdadera amistad o el amor fraterno como condición fundamental
para el mantenimiento de la armonía familiar-.
-Aquella frase célebre del Benito Juárez: “el respeto al derecho ajeno es la
paz”, repetida hasta el cansancio y pocas veces puesta en práctica,
inequívocamente fue un sensato exhorto a la prudencia para evitar abusos
que llevan a la confrontación y la violencia o lo que la moda ha dado en
llamar el “bullying”. Una mala conducta tan común como nefasta que
deteriora las relaciones personales y es causa de todo tipo de conflictos-.
-Así que muy queridos familiares, lean el libro que les entregará el notario y
dentro de veinte días, vuelvan a este lugar para comunicar sus reflexiones y
entonces cada uno de ustedes conocerá nuestra voluntad testamentaria-.
La carta concluyó de la siguiente manera.
-Para terminar queremos darles las gracias por los buenos momentos que nos
regalaron y pedirles perdón por los malos que les hayamos hecho pasar y
ahora sólo nos resta expresar el deseo de que Dios les de la inteligencia y
sabiduría para encontrar la felicidad que normalmente buscamos fuera y no
somos capaces de hallar dentro de nosotros donde se anidan los más nobles o
insanos sentimientos y nadie más que nosotros mismos podemos discernir
cómo liberarnos de aquello que nos enferma y acogernos a lo que nos alivia
para ser felices y dejar atrás todo lo que pudiera causarnos infelicidad.-