JOURNALfor the STUDYof ANTISEMITISM

2011] EL TRASFONDO POLÍTICO 69
apoya al diplomático argentino Rogelio Pfirter en su nominación como
Director General del OIEA, finalmente siendo él entonces vista favorablemente
por Washington y desfavorablemente por Teherán, entre otras
consideraciones.
A finales de marzo pasado, el diario perfil publica la noticia que
generó una controversia de propagación. Uno de sus principales columnistas,
mencionando un documento secreto, denunció la existencia de negociaciones
en curso entre Buenos Aires y Teherán donde primero dejaría la
causa judicial abierta contra el segundo a cambio de mejoras en el intercambio
comercial. El Gobierno israelí reaccionó airadamente, etiquetado
como “muy grave” a la noticia, advirtiendo que, para confirmar, el Argentina
conducta constituiría “una manifestación de cinismo infinito y
deshonor a muertos” y poniendo en duda la invitación extendida previamente
el canciller argentino a visitar Jerusalén.
El fiscal de la causa AMIA, Dr. Alberto Nisman, negó la petición periodística
plenamente y líderes comunitarios añadió a la denegación. El
Gobierno, sin embargo, permaneció en silencio. El embajador israelí en
Buenos Aires, Daniel Gazit, pidió explicaciones al Ministerio de Relaciones
Exteriores del país, pero todavía diez días más tarde, informó el Jerusalem
Post, “no recibió ninguna respuesta oficial.” La primera reacción pública
dio el canciller argentino desde Israel. Interrogado por la prensa, inicialmente
eludió tocar el espinoso tema invocar las reglas de la Torá y apelando
a la memoria de la murió el padre, el famoso periodista Jacobo, en parábolas
inusuales que trajeron acerca de desacuerdo. Por último, Timerman
afirmó lo siguiente repudia lo, que fue interpretada como el informe de
perfil: “No hay ninguna prueba de que Argentina ha cambiado su curso de
acción, que comenzó en 2003 con la elección de Néstor Kirchner, en el que
el objetivo de nuestro país es investigar el tema de los atentados a la AMIA
y la Embajada de Israel.”
Por otra parte, perfil no contribuyó a aclarar las cosas cuando se
deniega el acceso a la documentación que se utilizó básica para la noticia
antes de un pedido del Centro Simon Wiesenthal, que llevó a esta organización
internacional judía al lamentar la decisión del diario porque ella
“puede desacreditar la validez de las señales.” En esta atmósfera de dudas y
ante una denuncia tan grave, era expectable oficial denegado contundente,
acreditado en un comunicado cuyo texto escrito podría disipar toda
ambigüedad. Lamentablemente nunca sucedió.
El Gobierno también mantiene silencio antes otro relacionado con la
grave denuncia. El juez federal Daniel Rafecas reveló que las repetidas
manifestaciones que se producen delante de la Embajada de Israel pueden
ser organizadas por D’Elía con financiación de la embajada iraní. A pesar
de las graves consecuencias de la denuncia, el Gobierno prefirió no