december-2009

AL SUROESTE DE LA CIUDAD DE MONTERREY SE
encuentra el Parque Ecológico La Huasteca,
perteneciente al municipio de Santa Catarina. Este
sitio es también la puerta de entrada al hermoso
Parque Nacional Cumbres de Monterrey.
Sus principales características, y que lo diferencian
de las demás regiones, son su clima semidesértico
y sus formaciones rocosas escarpadas, que brindan
paredes verticales con escasa vegetación y lo
convierten en un paraíso para los escaladores nacionales.
También los extranjeros, en la temporada de
invierno, lo ven como una opción ideal para dejar las
bajas temperaturas de sus lugares de origen atrás.
Para los regios, “La Huasteca”, como le decimos
en la cultura popular, es algo más que un enclave
en el que disfrutar de la escalada; también se pueden
practicar otros deportes como el ciclismo, en
sus modalidades de ruta y montaña, el trekking, el
montañismo, los safaris fotográficos, el cañonismo
y muchas otras actividades más tranquilas, como la
simple observación de un atardecer. Desde mi experiencia
personal, La Huasteca significa mucho.
He pasado aquí importantes vivencias de mi
trayectoria deportiva, de exploración e incluso de
mi carrera en la fotografía. Como atleta multidisciplinario,
no me considero escalador ni mucho
menos. Si tuviera que escoger una actividad que me
representara más de entre el trekking, kayakismo,
espeleismo, cañonismo y ciclismo, definitivamente
elegiría esta última, por ser la que más practico.
Sin embargo, mis primeros contactos con la escalada
se remontan en el pasado al Parque Potrero
Chico en Hidalgo, Nuevo León, y a La Huasteca.
PARA EL CASO DEL PRESENTE ARTÍCULO, MI OBjetivo
fue conformar un grupo que incluyera expertos
en la materia y personas con la inclinación a la
práctica de actividades extremas, para juntos peinar
la zona y transmitir una buena experiencia de la actividad
en La Huasteca. El reto era además retratar
la aventura con buenas tomas que reflejaran el
carácter impactante de las formaciones rocosas. El
grupo quedó integrado por Adriana Farías, Miguel
Fernández, Gustavo Casas y un servidor.
DICIEMBRE/ENERO 2010 < enVIVA < 35