Libro de Charreria - Yamil, El Orgullo de México
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Limpieza <strong>de</strong>l caballo.- No <strong>de</strong>be pasearse con excesiva frecuencia la<br />
almohaza por la piel <strong>de</strong>l caballo fino, <strong>de</strong>biendo en cambio emplearse la bruza. <strong>El</strong><br />
empleo inmo<strong>de</strong>rado <strong>de</strong> aquélla resulta perjudicial, porque pue<strong>de</strong> ocasionar<br />
inflamaciones cutáneas. En ningún caso <strong>de</strong>be tener la bruza cerdas puntiagudas,<br />
cortas y duras. Los cascos se limpian con un estropajo.<br />
Tratándose <strong>de</strong> caballos finos, se <strong>de</strong>be limpiar los ojos, las fosas<br />
nasales etc., con un paño blando hume<strong>de</strong>cido. Los cascos, las rodillas y los<br />
corvejones se han <strong>de</strong> frotar con un estropajo fino o limpiarlos con un trapo <strong>de</strong> lana.<br />
Una vez verificada la limpieza, <strong>de</strong>be ventilarse la cuadra. cuando se<br />
trata <strong>de</strong> una granja o casa <strong>de</strong> campo, ha <strong>de</strong> hacerse la limpieza <strong>de</strong>l caballo al aire<br />
libre. <strong>El</strong> polvillo que se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong> en esta operación irrita los ojos <strong>de</strong>l caballo,<br />
principalmente cuando son reducidas las cuadras o cuando la aireación <strong>de</strong> éstas<br />
es <strong>de</strong>fectuosa. Para hacer la limpieza <strong>de</strong> los caballos indómitos o que tienen<br />
costumbre <strong>de</strong> mor<strong>de</strong>r, se atan muy cortos a una anilla colocada <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l<br />
pesebre. También conviene en estos casos poner un bozal a los caballos. Sin<br />
embargo, ni aun tratándose <strong>de</strong> los caballos menos dóciles conviene adoptar con<br />
ellos actitu<strong>de</strong>s violentas ni someterlos a tratamientos dolorosos. Con paciencia y<br />
con una pru<strong>de</strong>nte severidad se saca mucho partido hasta los animales más<br />
levantiscos.<br />
Hasta la terminación <strong>de</strong>l pienso no <strong>de</strong>be practicarse la limpieza.<br />
Antes <strong>de</strong> entrar los caballos en la cuadra, al volver <strong>de</strong>l trabajo tanto al mediodía<br />
como por la noche, es conveniente quitarles la capa <strong>de</strong> polvo que los cubre en los<br />
días calurosos <strong>de</strong>l verano, frotándolos con un estropajo o sacudiéndolos con unos<br />
zorros <strong>de</strong> crin.<br />
También <strong>de</strong>ben enjugarse con un paño las fosas nasales <strong>de</strong>l caballo.<br />
No conviene, sin embargo, exagerar la limpieza, porque<br />
principalmente en los caballos finos se origina una gran picazón, que les obliga a<br />
rascarse y restregarse continuamente.<br />
<strong>El</strong> baño.- <strong>El</strong> caballo agra<strong>de</strong>ce mucho el baño en los días calurosos<br />
<strong>de</strong>l verano. Por la acción <strong>de</strong>l agua se reblan<strong>de</strong>ce la epi<strong>de</strong>rmis y se <strong>de</strong>spegan las<br />
costras, que luego, una vez seco el cuerpo <strong>de</strong>l animal, se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>n fácilmente<br />
pasándole la almohaza o la bruza. No se <strong>de</strong>ben bañar los caballos<br />
inmediatamente <strong>de</strong>spués <strong>de</strong>l pienso ni conducirlos trotando hasta el lugar <strong>de</strong>l<br />
baño; una vez en éste ha <strong>de</strong> cuidarse que el animal no se lastime <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l agua.<br />
Un baño <strong>de</strong> cinco a diez minutos <strong>de</strong> duración es en general suficiente, pero, en<br />
todo caso, <strong>de</strong>be sacarse el animal <strong>de</strong>l baño en cuanto empiece a temblar, y<br />
<strong>de</strong>spués <strong>de</strong> bien seco conviene friccionarlo. Si se trata <strong>de</strong> lavar una yegua<br />
preñada o en el período <strong>de</strong> la cría, <strong>de</strong>be cuidarse <strong>de</strong> que no se moje el vientre ni<br />
las mamas para que no se enfríen. Si se carece <strong>de</strong> baño a<strong>de</strong>cuado, se pue<strong>de</strong> dar<br />
a los caballos en la misma cuadra un lavado con jabón.