POESIA Y PROSA EN LA OBRA DE SAN JIJAN ... - Fundación Speiro

POESIA Y PROSA EN LA OBRA DE S. JUAN DE LA CRUZ
perieneia y doctrina, inspiración y razonamiento. El carmelita se
encuentra ai las antípodas de esa especie de masturbación estética
que es el arte por el arte.. Y así demuestra necesitar en muchos
casos un texto literario el apoyo filosófico y teológico para
ser exactamente comprendido, de modo paralelo a como los objetos
que nos rodean exigen meditaciones más hondas que la
simple consideración cotidiana o la reflexión superficial para ser
bien entendidos. El carmelita nos enseña que a menudo la fe
religiosa es instrumento inexcusable de la comprensión racional.
Porque, si la poesía del místico de Fontivetos se mantiene inmarcesible,
¿ cómo podríamos declarar arrumbado, salvo en detalles
secundarios, el saber que la inspiró?
Insistiendo en esto último, observemos que los poemas de
fray Juan no son una excepción, vale decir que no sólo su poesía
tiene como diemento esencial una doctrina inspiradora. De cualquier
obra religiosa resulta incompleta la comprensión, si se prescinde
de las ideas que en ella palpitan. Cabe * poner de relieve
la excelencia estética, la maestría del artista,- las influencias sufridas,
el efecto que dicha obra ha de tener en los artistas posteriores,
etc., pero sin que se agote con todo ello el sentido, porque
al intérprete le falta uno de los elementos necesarios para la
intelección completa de sü objeto; le falta cultura religiosa.
Así, en un icono se notan la vivacidad de los colores, el contraste
de los mismos respecto del ; fondo dorado, la frontalidad
de las figuras y demás elementos característicos; peto se ignora
con frecuencia que estas peculiaridades son' sólo expresión de un
concepto teológico: la representación del santo 1 respectivo glorificado,
al que Dios le sirve de apoyo*, santo, cuyo cuerpo, penetrado
por la gracia, no proyecta sombra. Del" mismo modo', sé pone
de relieve, en la representación bizantina de la transfiguración
en el Tabor, el resplandor. que rodea a Cristo, más brillante por
el círculo u óvalo oscuro del cual se'destaca, sin saber que ese
círculo u óvalo significa la inmensidad y profundidad divinas,
mientras que el Redentor, es la luz y revelación de aquéllas. El
iconógrafo tieiiéi m Mente estar idea y dé brétá la beHezapeculíar
del cuadro. ° ^ ; ^
Igualmente, el Cristó müerto 'en la Cruz,. de Benvetíuto Cellini,
hermosa imagen de tdarfíl existente en la 'basflica.