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Mexsport / Christian Palma
RAÚL OCHOA
uego de dos años y medio
de litigio, la justicia de Sinaloa
dictaminó el “no ejercicio
de la acción penal” en
contra del entrenador Hugo
Daniel Fernández Vallejo,
acusado de abuso de confianza y fraude
genérico por la empresa Estadios de Sinaloa,
S.A. de C.V., propietaria del equipo
Dorados, de la división de ascenso.
La resolución emitida el pasado 24 de
marzo fue avalada por el Departamento de
Averiguaciones Previas, la Agencia Tercera
del Ministerio Público y el procurador general
de Justicia del estado, Alfredo Higuera
Bernal, debido a que no se acreditaron
los elementos que conforman esos ilícitos.
Para el técnico de origen uruguayo este
dictamen judicial constituye un fuerte
revés para el club sinaloense y la Federación
Mexicana de Futbol (FMF) encabezada
por Justino Compeán, pues afirma
que durante el proceso judicial este organismo
se condujo con parcialidad.
El fallo establece que Fernández no cometió
ningún ilícito en contra de Dorados, y
por ello el club deberá pagarle una indemnización.
Lejos de pronunciarse al respecto, la
FMF se limitó a citar a las partes en conflicto
por medio de la Comisión de Conciliación
y Resolución de Controversias, que encabeza
Francisco Rocha Bandala. La reunión se
efectuará el miércoles 18.
En entrevista con este semanario, el técnico
asegura que es una víctima más del llamado
“pacto de caballeros”, ese acuerdo no
escrito entre los dueños del futbol nacional
para proteger sus intereses. Sostiene que para
honrar a la justicia el equipo está obligado
a pagarle la totalidad del adeudo, así como
los gastos y costos del juicio.
En caso contrario, advierte Fernández,
“acudiríamos a instancias civiles como lo
plantea mi abogado defensor”. En febrero
pasado el representante legal del entrenador,
Simón Pablo Herrera Bazán, estimó
que de llevar el asunto a los tribunales el
monto de la indemnización podría alcanzar
los 12 millones de dólares (Proceso 1739).
El técnico denuncia que debido al pacto
de solidaridad entre los dueños del futbol
en México no ha podido dirigir durante
dos años y medio. A ello, argumenta, se
suma el daño que le causó la acusación que
Fernández. Exonerado
le hizo el equipo de “apropiarse indebidamente”
de una camioneta último modelo.
“Me han causado un perjuicio enorme
y quiero saber quién lo va a resarcir ahora
que se comprobó que todo fue una treta
de José Antonio Núñez, vicepresidente
de Dorados. Le mintió a su patrón, Eustaquio
de Nicolás, a quien aprecio mucho,
pero fue engañado por Núñez en el caso
de la camioneta”, afirma Fernández.
Agrega que la FMF no debió involucrarse
en este problema y asegura que nunca
dispuso indebidamente de la camioneta
Volkswagen Touareg, pues la adquirió, en
efectivo, en la agencia automotriz Tres Ríos
Motors, S. A. de C. V., propiedad de Eustaquio
de Nicolás. Este empresario también
es dueño de la inmobiliaria Homex.
Fernández refiere que todo comenzó
el 25 de febrero de 2008, cuando la Comisión
de Conciliación y Resolución de
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