ASPERGER-200-consejos-y-estrategias-para-educar-a-niños-y-niñas
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Apéndices<br />
1 - Análisis de comportamiento aplicado (ABA)<br />
El grupo PEAT<br />
Llegue a <strong>para</strong>r al análisis de comportamiento aplicado (ABA, applied behavior<br />
analysis) absolutamente por casualidad justo después de que mi hijo fuera<br />
diagnosticado de SA. Vi en un periódico local un artículo sobre padres que se habían<br />
juntado en la Universidad de Ulster <strong>para</strong> aprender la manera de manejar la conducta<br />
de sus hijos autistas. En ese momento la mayor parte de problemas que tenía con mi<br />
hijo eran de comportamiento, así que fui a ver que podía aprender.<br />
El grupo estaba llevado por el Dr. Mickey Keenan y el Dr. Ken Kerr del departamento<br />
de psicología. Estos dos hombres eran apasionados y dedicados a enseñar el ABA a<br />
los padres, pera permitirles manejar a sus <strong>niños</strong> autistas. Establecieron una<br />
organización conocida como PEAT (Parents’ Education as Autism Therapists) y<br />
dedicaron todo su tiempo libre y sin cobrar a ella. Después de unos años yo ya estaba<br />
implicada con el grupo PEAT y aprendí todo lo que pude sobre el ABA.<br />
Los otros padres del grupo generalmente lo usaban <strong>para</strong> enseñar a sus hijos las<br />
habilidades básicas como hablar, porque ellos tenían un autismo clásico. Para ser<br />
honesta a menudo me sentía un poco inadaptada en el grupo porque los desafíos de<br />
un niño con SA son muy diferentes de los que te supone un autismo clásico. Pero<br />
recordé que estaba interesada en los principios del ABA y creí que podían irme bien<br />
<strong>para</strong> aplicarlos a un niño con SA.<br />
El ABA me ayudó ya que no podemos controlar la conducta de nadie excepto la<br />
nuestra, pero podemos hacer muchas cosas <strong>para</strong> entrenar el comportamiento del<br />
niño a través de cómo respondemos. ¡Es divertido como cambian tus ideas! Yo solía<br />
imaginar que el “entrenamiento de conducta” no tenía cabida en los <strong>niños</strong>. Pero de<br />
hecho lo hacemos todo el tiempo, queramos o no.<br />
En mi experiencia, aunque el ABA es un trabajo duro, es una herramienta efectiva y<br />
poderosa. Ha mejorado la motivación de mi hijo y le ha ayudado en muchos aspectos<br />
de su comportamiento. A él le funcionó especialmente bien la Economía de fichas (ver<br />
apéndice 3 - Una economía de fichas). Las grandes ventajas fueron que le han<br />
permitido implicarse constructivamente y nos hemos dado cuenta que los dos<br />
estamos del mismo lado.<br />
Usar el ABA<br />
No es el objetivo de este libro describir el ABA con detalles. Aquí expongo un vistazo<br />
a grandes rasgos de lo que significan algunos de los principios y técnicas.<br />
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