10.07.2015 Views

ESCRITOS REUNIDOS - Salta

ESCRITOS REUNIDOS - Salta

ESCRITOS REUNIDOS - Salta

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

69sistema completo de enseñanza de esa materia en el país. Ingenieros tuvo una gran oportunidadde llevar a la práctica sus saberes científicos cuando se hizo cargo del Instituto de Criminologíade la Penitenciaría Nacional de Buenos Aires. En ese mismo momento ya se había disparado sufaceta sociológica, que tendría un hito en 1913 con la publicación de La sociología argentina yque culminaría cuando, terminando ya la década del 10, vieron la luz los dos tomos de Laevolución de las ideas argentinas. Ciento cuarenta y cuatro obras escritas por los más grandespensadores argentinos formaron la colección La cultura argentina, esta serie fue editada porIngenieros, que más o menos al mismo tiempo fundó la Revista de Filosofía, un periódicobimestral guía del pensamiento argentino de la época durante diez años. Además de su obraclínica y sociológica, Ingenieros fue el responsable de la expresión filosófica más sistemática eimportante de toda Latinoamérica, sosteniendo una posición que adhería al positivismo deprincipios de siglo. Siendo aun muy joven se alejó de la vida universitaria. Cuando JoséIngenieros murió, en 1925, era uno de los intelectuales de mayor peso en la cultura argentina ylatinoamericana.Hemos seleccionado de su obra “El hombre mediocre” el capítulo VII denominado “Lamediocracia” y tal vez, en forma poco respetuosa e irreverente, hemos parafraseado el texto conla intención de aligerarlo de arcaísmos y de preciosismos lingüísticos que en su época erancondición sine qua non para expresarse y publicar académicamente y por otra parte hablaban dela enjundia y de la elevada condición intelectual del escritor científico.Los idealismos se exaltan cuando las naciones se constituyen y cuando se renuevan.Primero es ansia de libertad y lucha por la independencia, más tarde sobreviene la crisis deconsolidación institucional. Por momentos, parece que se pronuncian palabras definitivas;plasman los estadistas sus planes visionarios y el pueblo pone su corazón en la balanza de sudestino.Pero los pueblos tienen largas intercadencias; por más altos que sean los ideales éstos notrabajan con ritmo continuo en permanente evolución y progreso. Hay horas de entusiasmo yfervor y las hay de apatía, con vigilias y sueños, días y noches, primaveras y otoños, en cuyoalternarse infinito se divide la continuidad del tiempo.En ciertos períodos la nación se adormece hacia dentro del país. El organismo vegeta; el espírituse amodorra. Los apetitos acosan a los ideales, tornándose dominadores y agresivos. A veces,ningún clamor del pueblo se percibe y no resuena el eco de grandes voces animadoras. Todos seapiñan en torno de los manteles oficiales para alcanzar alguna migaja de la merienda. Es elclima de la mediocridad. Entra en la penumbra el culto por la verdad, el afán de admiración, lafe en creencias firmes, la exaltación de ideales, el desinterés, la abnegación, todo lo que está enel camino de la virtud y de la dignidad. Todo lo vulgar encuentra fervorosos adeptos en los querepresentan los intereses militantes; sus más encumbrados portavoces resultan esclavos en su

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!