Boletín Sociedad <strong>de</strong> Psiquiatría y Neurología <strong>de</strong> <strong>la</strong> Infancia y Adolescencia Año 15, Nº 1, Septiembre 2004que “pier<strong>de</strong>”en ello; alre<strong>de</strong>dor <strong>de</strong> dos horas aldía. Si se consi<strong>de</strong>ra otras dos horas <strong>de</strong> rascado,<strong>de</strong>dica en total cuatro horas a este tipo <strong>de</strong>conductas, lo que le afecta en su <strong>de</strong>sempeñoacadémico. Por otra parte, cabe <strong>de</strong>stacar quea <strong>la</strong> edad <strong>de</strong> 14 años presentó durante un añoun trastorno por atracón.Se inicia tratamiento con fluoxetina 20 milígramosal día, aumentándose a 40 milígramos a<strong>la</strong>s dos semanas. Al mes <strong>de</strong> tratamiento <strong>la</strong>paciente refiere una reducción en el tiempo<strong>de</strong>dicado al rascado <strong>de</strong> un 50%. Se aumenta a60 milígramos, negativizándose el rascado a <strong>la</strong>sdos semanas. La masturbación disminuyenotablemente, recurriendo a el<strong>la</strong> <strong>de</strong> modoesporádico, pero esta vez <strong>de</strong> forma voluntaria.Sin antece<strong>de</strong>ntes psiquiátricos conocidos.DiscusiónEn los casos presentados se aprecia <strong>la</strong>psicopatología y fenomenología <strong>de</strong>scrita en <strong>la</strong>literatura para el rascado cutáneo compulsivo.Para el menor <strong>de</strong>l primer caso como para suhermana (caso II), <strong>de</strong>staca <strong>la</strong> precocidad en <strong>la</strong>edad <strong>de</strong> inicio, siete y ocho años respectivamente,que coinci<strong>de</strong> con <strong>la</strong> edad mínimadocumentada en <strong>la</strong> literatura (3); quizás estopodría atribuirse a <strong>la</strong> carga genética materna,también con una edad muy precoz <strong>de</strong> inicio, ycon ello tal vez a una mayor penetrancia. Noexiste evi<strong>de</strong>ncia en <strong>la</strong> literatura que re<strong>la</strong>cione<strong>la</strong> precocidad <strong>de</strong> inicio con una mayor gravedady cronicidad.Por otra parte, los casos I y IV se re<strong>la</strong>cionancon otras conductas repetitivas. El primero <strong>de</strong>estos presenta otros fenómenos como “chupar<strong>la</strong> ropa”, pero sin el carácter egodistónico <strong>de</strong>lrascado, correspondiendo más bien esto a unhábito que a una conducta compulsiva. Lapaciente <strong>de</strong>l cuarto caso refiere haberpresentado un trastorno por atracón previo alrascado cutáneo, y parale<strong>la</strong>mente a este últimouna masturbación compulsiva.El caso II y III muestran una evolución crónica,<strong>de</strong> 10 años para el primero y <strong>de</strong> aproximadamente40 años para el segundo. Los otros doscasos no han tendido a <strong>la</strong> cronicidad por ser elcomienzo <strong>de</strong>l cuadro clínico aproximadamente1 a 2 años previo al diagnóstico. L<strong>la</strong>ma <strong>la</strong>atención que pese a producir lesionescicatriciales y asociarse a un compromisopsicosocial importante, no se consulta <strong>de</strong> modoespontáneo al no consi<strong>de</strong>rarse una enfermeda<strong>de</strong>n si mismo, sin haber sido reconocida por los<strong>de</strong>rmatólogos <strong>la</strong> naturaleza psiquiátrica <strong>de</strong>lcuadro.Todos los casos <strong>de</strong>scriben <strong>la</strong> incapacidad <strong>de</strong>contro<strong>la</strong>r el impulso, <strong>la</strong> inquietud previa y <strong>la</strong>especie <strong>de</strong> estado <strong>de</strong> trance, alivio o p<strong>la</strong>cerdurante el rascado, pese a saber que <strong>la</strong>consecuencia es perjudicial.Los casos III y IV, por ser quizás los más graves,presentan un mayor compromiso autoperceptivoy social, evitando situaciones don<strong>de</strong> tenganque mostrar el cuerpo como bañarse en piscinao ir a <strong>la</strong> p<strong>la</strong>ya, <strong>de</strong>biendo usar sólo cierto tipo <strong>de</strong>ropas. Para el último caso se agrega el hechoque el rascado <strong>de</strong>manda una gran cantidad <strong>de</strong>tiempo, ocurriendo lo mismo para el segundocaso.Por último, como se ha <strong>de</strong>scrito, se asocia elrascado al uso complementario <strong>de</strong> instrumentoscomo pinzas o pinches, lo que se aprecia parael segundo y cuarto caso clínico.ConclusionesLa preocupación <strong>de</strong> los especialistas médicostanto <strong>de</strong>rmatólogos como psiquiatras por <strong>la</strong><strong>de</strong>rmatotilomanía es escasa. Esto se refleja en<strong>la</strong> reducida literatura existente al respecto a nivelmundial, y en el no reconocimiento comoentidad nosológica en <strong>la</strong>s c<strong>la</strong>sificaciones <strong>de</strong>enfermeda<strong>de</strong>s mentales actuales.Creemos que los términos “<strong>de</strong>rmatotilomanía”y “rascado cutáneo compulsivo” (compulsiveskin picking) <strong>de</strong>limitan mejor <strong>la</strong> fenomenologíay psicopatología <strong>de</strong> este trastorno que sussinónimos “excoriación neurótica” o “acnéexcoriado”, términos que podrían confundirsecon cualquier otra patología, ya sea psiquiátricao médica, que curse con un rascado cutáneorepetitivo.56
DermatotilomaníaJuan Carlos Martínez et al.Consi<strong>de</strong>rando <strong>la</strong> grave consecuencia física ypsicosocial que conlleva eventualmente untrastorno como este y su <strong>de</strong>sconocimiento porparte <strong>de</strong> los especialistas <strong>de</strong>rmatólogos ypsiquiatras, sugerimos buscar <strong>de</strong> modo dirigidomediante el interrogatorio y <strong>la</strong> inspección física<strong>la</strong> presencia <strong>de</strong> rascado cutáneo compulsivo,especialmente en pacientes que presentenmanifestaciones <strong>de</strong>l espectro obsesivocompulsivo asociado a lesiones cutáneasdifusas.Finalmente, a través <strong>de</strong> <strong>la</strong> experiencia clínica<strong>de</strong> cuatro casos, hemos confirmado que <strong>la</strong>Dermatotilomanía respon<strong>de</strong> <strong>de</strong> modore<strong>la</strong>tivamente rápido y a<strong>de</strong>cuado a dosisintermedias <strong>de</strong> fluoxetina.Bibliografía1. Bohne A., Wilhelm S., Keuthen N., et al. SkinPicking in German Stu<strong>de</strong>nt. BehaviorModification. 2002. 26:3,330-3392. Keuthen N., Deckersbach T., Wilhelm S., etal. Repetitive Skin Picking in a Stu<strong>de</strong>ntPopu<strong>la</strong>tion and Comparison with a Sampleof Self Injurious Skin Pickers. Psychosomatics2000.41:33. Bloch M., Elliott M., Thompson H., et al.Fluoxetine in Pathologic Skin Picking.Psychosomatics 2001.42:4.4. Lochner Ch., Simeon D., Niehaus D., et al.Trichotillomania and Skin-Picking: APhenomenological Comparison. Depressionand Anxiety 2002.15:83-86.5. Keuthen N., Deckersbach T., Wilhelm S., etal. The Skin Picking Impact Scale (SPIS).Psychosomatics 2001.42:5.57