12.07.2015 Views

Catequesis de Juan Pablo II sobre el sacerdocio - amoz.com.mx

Catequesis de Juan Pablo II sobre el sacerdocio - amoz.com.mx

Catequesis de Juan Pablo II sobre el sacerdocio - amoz.com.mx

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

por razones no sólo históricas y prácticas, sino también <strong>de</strong>rivadas <strong>de</strong> la congruencia,captada cada vez mejor, entre <strong>el</strong> c<strong>el</strong>ibato y las exigencias <strong>de</strong>l <strong>sacerdocio</strong>.5. El concilio Vaticano <strong>II</strong> enuncia los motivos <strong>de</strong> esa conveniencia íntima <strong>de</strong>l c<strong>el</strong>ibatorespecto al <strong>sacerdocio</strong>: "Por la virginidad o c<strong>el</strong>ibato guardado por amor <strong>de</strong>l reino <strong>de</strong> losci<strong>el</strong>os, se consagran los presbíteros <strong>de</strong> nueva y exc<strong>el</strong>ente manera a Cristo, se unen másfácilmente a él con corazón indiviso, se entregan más libremente, en él y por él, alservicio <strong>de</strong> Dios y <strong>de</strong> los hombres, sirven más expeditamente a su reino y a la obra <strong>de</strong>regeneración <strong>sobre</strong>natural y se hacen más aptos para recibir más dilatada paternidad enCristo [...]. Y así evocan aqu<strong>el</strong> misterioso connubio, fundado por Dios y que ha <strong>de</strong>manifestarse plenamente en lo futuro, por <strong>el</strong> que la Iglesia tiene por único esposo aCristo. Conviértense, a<strong>de</strong>más, en signo vivo <strong>de</strong> aqu<strong>el</strong> mundo futuro, que se hace yapresente por la fe y la caridad, y en <strong>el</strong> que los hijos <strong>de</strong> la resurrección no tomarán ni lasmujeres maridos ni los hombres mujeres" (Presbyterorum ordinis, 16; cf. Pastores dabovobis, 29; 50; Catecismo <strong>de</strong> la Iglesia católica, n.1579).Esas son razones <strong>de</strong> noble <strong>el</strong>evación espiritual, que po<strong>de</strong>mos resumir en los siguientes<strong>el</strong>ementos esenciales: una adhesión más plena a Cristo, amado y servido con un corazónindiviso (cf. 1 Co 7, 32.33); una disponibilidad más amplia al servicio <strong>de</strong>l reino <strong>de</strong> Cristoy a la realización <strong>de</strong> las propias tareas en la Iglesia; la opción más exclusiva <strong>de</strong> unafecundidad espiritual (cf. 1 Co 4,15); y la práctica <strong>de</strong> una vida más semejante a la vida<strong>de</strong>finitiva <strong>de</strong>l más allá y, por consiguiente, más ejemplar para la vida <strong>de</strong> aquí. Esto valepara todos los tiempos, incluso para <strong>el</strong> nuestro, <strong>com</strong>o razón y criterio supremo <strong>de</strong> todojuicio y <strong>de</strong> toda opción en armonía con la invitación a <strong>de</strong>jar todo, que Jesús dirigió a susdiscípulos y, especialmente, a sus Apóstoles. Por esa razón, <strong>el</strong> Sínodo <strong>de</strong> los obispos <strong>de</strong>1971 confirmó: "La ley <strong>de</strong>l c<strong>el</strong>ibato sacerdotal, vigente en la Iglesia latina, <strong>de</strong>be sermantenida íntegramente" (L'Osservatore Romano, edición en lengua española, 12 <strong>de</strong>diciembre <strong>de</strong> 1971, p. 5).6. Es verdad que hoy la práctica <strong>de</strong>l c<strong>el</strong>ibato encuentra obstáculos, a veces incluso graves,en las condiciones subjetivas y objetivas en las que los sacerdotes se hallan. El Sínodo <strong>de</strong>los obispos las ha examinado, pero ha consi<strong>de</strong>rado que también las dificulta<strong>de</strong>s actualesson superables, si se promueven "las condiciones aptas, es <strong>de</strong>cir: <strong>el</strong> incremento <strong>de</strong> la vidainterior mediante la oración, la abnegación, la caridad ardiente hacia Dios y hacia <strong>el</strong>prójimo, y los <strong>de</strong>más medios <strong>de</strong> la vida espiritual; <strong>el</strong> equilibrio humano mediante laor<strong>de</strong>nada incorporación al campo <strong>com</strong>plejo <strong>de</strong> las r<strong>el</strong>aciones sociales; <strong>el</strong> trato fraterno ylos contactos con los otros presbíteros y con <strong>el</strong> obispo, adaptando mejor para <strong>el</strong>lo lasestructuras pastorales y también con la ayuda <strong>de</strong> la <strong>com</strong>unidad <strong>de</strong> los fi<strong>el</strong>es"(ib.).Es una especie <strong>de</strong> <strong>de</strong>safío que la Iglesia lanza a la mentalidad, a las ten<strong>de</strong>ncias ya lasseducciones <strong>de</strong> este siglo, con una voluntad cada vez más renovada <strong>de</strong> coherencia y <strong>de</strong>fi<strong>de</strong>lidad al i<strong>de</strong>al evangélico. Para <strong>el</strong>lo, aunque se admite que <strong>el</strong> Sumo Pontífice pue<strong>de</strong>valorar y disponer lo que hay que hacer en algunos casos, <strong>el</strong> Sínodo reafirmó que en laIglesia latina " "no se admite ni siquiera en casos particulares la or<strong>de</strong>nación presbiteral <strong>de</strong>hombres casados" (ib.). La Iglesia consi<strong>de</strong>ra que la conciencia <strong>de</strong> consagración total38

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!