19.03.2018 Views

EL-COSMOS-DE-BORGES

García Márquez habría hecho un comentario sobre la obra de Borges: Era “uno de los autores que más leía y que menos le gustaba”; añadía que, “a pesar de haber enseñado a generaciones el arte de pulir la palabra” lo consideraba vacío y escritor de evasiones. La afirmación convocó mi curiosidad. Acudí a las “Obras Completas” para revisarlas sobre la base del repaso que había efectuado, una vez más, de la Historia de la Filosofía, sólo así tendría una prueba que me permitiría establecer si Borges, uno de mis escritores favoritos, escribía para los agujeros negros. Para llevar a cabo esta verificación probé su consistencia usando como indicador los principios del Materialismo Dialéctico. Era una época ávida de revisiones, en la que aún me consideraba el depositario del destino del proletariado y con él, de la humanidad Cuando evoco la decisión de someter a Borges a una prueba de consistencia a través de la Dialéctica, me sorprende su fuerza intuitiva. Allí identifiqué al gran picapedrero de la filosofía y escribí estos ensayos en una primera edición, la que no fue muy conocida; espero que ahora sea leída con la emoción con que ha sido escrita.

García Márquez habría hecho un comentario sobre la obra de Borges: Era “uno de los autores que más leía y que menos le gustaba”; añadía que, “a pesar de haber enseñado a generaciones el arte de pulir la palabra” lo consideraba vacío y escritor de evasiones. La afirmación convocó mi curiosidad. Acudí a las “Obras Completas” para revisarlas sobre la base del repaso que había efectuado, una vez más, de la Historia de la Filosofía, sólo así tendría una prueba que me permitiría establecer si Borges, uno de mis escritores favoritos, escribía para los agujeros negros. Para llevar a cabo esta verificación probé su consistencia usando como indicador los principios del Materialismo Dialéctico. Era una época ávida de revisiones, en la que aún me consideraba el depositario del destino del proletariado y con él, de la humanidad
Cuando evoco la decisión de someter a Borges a una prueba de consistencia a través de la Dialéctica, me sorprende su fuerza intuitiva. Allí identifiqué al gran picapedrero de la filosofía y escribí estos ensayos en una primera edición, la que no fue muy conocida; espero que ahora sea leída con la emoción con que ha sido escrita.

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Entonces el hombre imagina lo que no existe, se vuelve loco<br />

Finalmente, el suicidio aparece como refugio final<br />

¡Cosa increíble! exclama: el pensamiento y la imaginación vencen al<br />

instinto; pero considera que el suicidio individual es vano<br />

Todo eso, porque la cosa en sí, la Voluntad, que está incrustada en la<br />

especie, no es afectada<br />

Por lo que podemos deducir, el suicidio colectivo sería la única alternativa<br />

para evitar el sufrimiento humano<br />

La vida sería la gran joroba que carga encima a la muerte, que sería<br />

la redentora del hombre<br />

Las guerras serían las más benévolas formas colectivas que apresurarían<br />

la liberación de la humanidad<br />

Los genocidios por hambre y la sobreexplotación serían valiosos adjuntos<br />

de la gran obra de emancipación universal<br />

Borges, quien se encandila más con lo más oscuro, observa cómo<br />

viene la mano y decide que las gibas individuales pesan mucho<br />

“La Casa de Asterión” es un buen ejemplo para decirlo<br />

No sale de su casa aunque sus catorce puertas no tienen cerraduras<br />

Cierta impaciencia generosa no ha permitido que aprendiera a leer<br />

y así las noches y los días son largos<br />

Para entretenerse juega, entre otros, a dejarse caer desde azoteas<br />

hasta ensangrentarse y sabe que su casa es el mundo<br />

98

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!