You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
El Dios <strong>de</strong> <strong>los</strong> Procesos<br />
por nadie, las pocas veces que había predicado no ministraba, aún<br />
se sintiera la presencia <strong>de</strong> Dios en <strong>el</strong> ambiente, prefería entregar <strong>el</strong><br />
micrófono al pastor pues no me sentía preparado y como que le<br />
tenía miedo a lo que pudiera pasar. Nunca nadie había caído por una<br />
oración mía, <strong>el</strong> único que se había caído fui yo mismo, cuando en mi<br />
habitación mientras practicaba una predica me dije frente al espejo:<br />
“Esta palabra si es po<strong>de</strong>rosa…” Me puse la mano en la frente y yo mismo<br />
me caí hacia atrás. Después, nadie más. Pero como la imaginación es<br />
libre, empecé a ministrar, miré a un hombre que estaba en la segunda<br />
fila d<strong>el</strong> lado <strong>de</strong>recho, lo señalé y le dije: ¡Eduardo! Él abrió <strong>los</strong> ojos y<br />
me miró: Dios me dice que te diga… y le dije unas palabras que sentía<br />
<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> mí e hicieron que él empezara a llorar y cayó <strong>de</strong> rodillas.<br />
Dije: ¡Al<strong>el</strong>uya! Miré al fondo y vi en la puerta a un caballero <strong>de</strong> pi<strong>el</strong><br />
blanca, con barba y un tshirt, le dije: ¡Javier! Y él me miró, “Dios me<br />
dice que te diga”… empecé a hablarle <strong>de</strong> su vida con tal autoridad<br />
que una dama que estaba en la tercera fila d<strong>el</strong> lado izquierdo salió<br />
al pasillo danzando y brincando. Bueno, ahí me llamó mi madre para<br />
algo, así que terminé mi imaginación y pasaron <strong>los</strong> días hasta que<br />
vino <strong>el</strong> domingo, <strong>el</strong> día <strong>de</strong> predicar <strong>de</strong> verdad.<br />
Me entregan a predicar y como todo predicador nuevo hice lo que<br />
hoy llamaría: “un <strong>de</strong>sastre <strong>de</strong> predica”, Jajaja, era una <strong>de</strong> esas predicas<br />
en la que uno quiere <strong>de</strong>cir <strong>de</strong> todo y <strong>de</strong>mostrar lo tanto que sabe y<br />
entonces empieza predicando en Génesis y termina en Apocalipsis,<br />
cruza a Elías con Eliseo. Uno se pone nervioso y se confun<strong>de</strong>. A ver, un<br />
predicador y humorista argentino r<strong>el</strong>ata algo parecido:<br />
“Moisés vio la zarza ardiendo y <strong>de</strong> repente empezó a llover <strong>el</strong> diluvio<br />
pero gracias a Noé subió al arca, don<strong>de</strong> había un gran pez, <strong>el</strong> que<br />
vomitó a Jonás y viendo a Esteban que estaba siendo apedreado, una<br />
parte <strong>de</strong> Esteban cayó entre <strong>los</strong> pedregales, otra entre <strong>los</strong> espinos…<br />
Mientras Saulo, Pablo y Elías consentían en su muerte.” Jajaja, es<br />
exagerando pero no estoy muy lejos <strong>de</strong> esa realidad, <strong>los</strong> predicadores<br />
nuevos predican <strong>de</strong> todo lo que saben <strong>de</strong> la biblia.<br />
El caso fue que luego <strong>de</strong> predicar mi mensaje “variado” dije: “pónganse<br />
<strong>de</strong> pie”, cerré mis ojos y <strong>de</strong>trás d<strong>el</strong> pulpito, ahí medio escondido<br />
154│El Proceso <strong>de</strong> la Paciencia