PERE VIRGILI - Fundació Uriach 1838

ialromecánico en la medicina, de lo que da pruebas el siguiente fragmento dc su
obra de 1703 De uso ratiolinii ~echa~ici in medicina:
Aquellos que intentan conocer las fuerzas del cuerpo basándose en la
observación (...) mediante cálculos geométricos son llamados mecánicos.
Precisamente la aplicación de esta ciencia y la bi:illante luz de la verdad
demostrada se han recomendado tanto a los sabios. que no sería posible
encontrar fácilmente otro mérodo científico alabado igualmente y
unánimemente aprobado en cualquier época (..j Resulta evidente que el
cuerpo humano es una máquina, cuyas partes sólidas son, por una parte,
vasos adecuados para conlener fluidos. para darles una dirección, para
moverlos, separarlos. unirlos y mezclarlos; por otra parte, como ingenios
mecánicos que medla~te su forma, dureza j1relaci6n mutua, interactúan con
otros y hacen posibles determinados moí~imientos~.
La tercera opción es la representada, como queda dicho. por Stahi, quien en su
escrito De passionibus animi corporis h~Ma~ljm varie alierantibils (1695) escribe
nada menos que esto:
El alma construye para síai cuerpo, lo preserva j1 actúa en él y medianle él
en orden a un fh í~eterminado, aun Cuando a veces se desvía de este fin4.
Y en su Oissrrtario inauguralis medica dc mcdicina medicinae curiosae (1 714):
Se han realizado grandes esfuerzos para apiicar a los cuerpos vivientes
deducciones incoherentes. frecuentemente buscadas en ciencias remotas. Se
ha querido explicar los movimientos vilales y su ordenación exclusivamente
mediante ieyes mecánicas, a partir de las cualidades materiales de las
partes siinples y dei "corpus mi,utum': como si no hubiera una fuerza y una
acción superior. que fuese activa y móvii, como si no hubiera un principio
que dirigiera, dispusiera, ordenara y gobernara el movimiento (...) ~Vingijna
máqcjina, por perfecramente elaborada que esté, puede por símisma