DIÓGENES LAERCIO – 1792 – Sobre las vidas, opiniones y

28 LIBRO I.
Isla rica y preciosa , vindicando
El gran borron que nuestro honor padece.
3 Induxo también los Atenienses á que tomasen
el Chcrsoneso Táurico. Para que no pareciese
que los Atenienses habían tomado á Salamina
solo por la fuerza y no por derecho, abrió
diferentes sepulcros, c hizo ver que los cadáveres
estaban sepultados de cara al oriente, lo qual
era rito de los Atenienses en enterrar sus muertos.
Lo mismo demostro por los edificios sepulcrales
, construidos de cara al oriente, y con los
nombres de las familias esculpidos : lo qual era
propio de los Atenienses. Algunos dicen que la
Catálogo 3 de Homero, despues del verso:
Ayax de Salamina traía doce naves:
anadio el siguiente:
T las puso donde estaban las falanges
de los Atenienses.
4 Desde entonces tuvo en su favor la plebe,
y gustosa quisiera fuese su Rey 4 ; pero el no
solo no adhirió, sino que aun, como dice Sosí-
3 AI catálogo que forma
Homero de las naves que los
pueblos de Grecia enviaron á
la expedición de Troya.
4 Tvmw«TH*i. Laercio usa
algunas veces promiscuamente
el nombre de Tirano , y el de
Rey , sin embargo de que son
cosas muy distintas. Tirano,
Tvj«»if t era entre los Griegos
qualquiera que se alzaba Rey
en algún Pueblo libre, 6 Bepü-
blica , v. g. Pisistrato en Ate-
nas. Rey , B«#ixiir , era el que
tenia el Reyno por voluntad de
los vasallos.
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