La razón sobre la fe - Publicatuslibros.com

INTRODUCCIÓN.
“Por razón de su dignidad todos los seres humanos, en cuanto que son personas, es decir,
dotados de razón y de voluntad libre y, por eso, investidos de personal responsabilidad, están
por su misma naturaleza y por deber moral obligados a buscar la verdad, en primer lugar la
concerniente a la religión. Están obligados también a adherirse a la verdad conocida y a ordenar
toda su vida según sus exigencias. Ahora bien, la verdad debe buscarse de modo apropiado a la
dignidad de la persona humana y a su naturaleza social, es decir, con una búsqueda que sea
libre, con la ayuda de la enseñanza o de la educación, por medio de la comunicación y del
diálogo”.
(Declaración sobre la libertad religiosa. Dignitatis humanae.)
Cuando alzo la mirada hacia arriba y contemplo el universo, la maravilla del sol y las estrellas,
que en la noche relucen como habitantes silenciosos, lejanos, inalcanzables; cuando me
introduzco a través de la lectura en el conocimiento limitado de esa inmensa bóveda celeste;
cuando me maravillo de la enamorada luna y veo algún que otro planeta tan lejano como el
infinito; cuando pienso en ese orden precioso del universo del que formamos parte; cuando mi
mirada se vuelve hacia abajo y me doy cuenta de la infinita grandeza de nuestra naturaleza, no
puedo dejar de creer que existe un algo o alguien CREADOR invisible, fuera del alcance de
nuestro limitado conocimiento, capaz de tan enorme obra. Y sin dudar se me refleja en la mente
la certeza de que ese Ser desconocido no puede ser otro que el mismísimo y verdadero DIOS.
(Soy totalmente consciente que empleo el concepto “DIOS” como hubiera podido utilizar otro cualquiera, ya que
absolutamente nadie ha podido demostrar ni hablar de ese “algo o alguien” creador del universo y menos darle un
nombre. Yo he querido llamarlo así para que guarde una cierta coordinación con el contenido de mi trabajo.)
En cambio, cuánta será mi tristeza al darme también cuenta de que el hombre, verdadero
protagonista de toda esta obra la castiga, la utiliza mal, acaba con sus recursos, la emplea
muchas veces para su conveniencia, la contamina, elimina poco a poco sus especies
vivientes....., en fin, no la cuida como ella se merece.
Y al buscar una explicación a este comportamiento humano, me pongo a través del estudio a
caminar hacia atrás para buscar el punto de partida en el que nace ese mal planteamiento y así
entender el porqué de la actitud humana. El caso es que el hombre ha evolucionado de una
forma incorrecta, creando hambre, enfermedades, miseria, marginación y guerras.
En ese andar hacia atrás me he dado cuenta de lo largo que se me ha hecho el camino. He
pasado por años, por épocas, por siglos, por muchos siglos, por miles de años, y al final he
topado con el muro del principio, con el primer proceso de la evolución. Quiere esto decir que
ha existido un planteamiento correcto en la existencia primera del mundo.
La vida tiene facetas positivas y negativas para el hombre. Qué duda cabe que la amistad, la
familia, forman parte entre muchas otras cosas de lo bueno; pero, ¿qué decir de la explotación,
de la riqueza, de la pobreza, de la marginación, de las injusticias, del hambre, de la mala
distribución de los bienes sobre la tierra?. ¿Quiénes han destruido ese planteamiento inicial?.
La razón sobre la fe Joaquín Cózar Infante 5