La razón sobre la fe - Publicatuslibros.com
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LA PARÁBOLA DEL HIJO PRÓDIGO. (Lucas. XV, 11-32). Es una rabiosa actualidad. No<br />
faltan quienes l<strong>la</strong>man a <strong>la</strong> puerta y quieren volver. Mas, desgraciadamente, tampoco faltan los<br />
que arrugando <strong>la</strong> frente, creen que su conducta ejemp<strong>la</strong>r no es suficientemente premiada. Pero<br />
JESÚS, abre alegremente <strong>la</strong>s puertas, y es de esperar que los alejados, movidos por tal<br />
conducta, volverán en masa a <strong>la</strong> casa paterna. Es tan grande <strong>la</strong> misericordia de JESÚS que<br />
siempre espera con los brazos abiertos a todos aquellos que quieran volver a Él . Cuando el<br />
hombre se haya cansado de buscar y no encontrar, siempre JESÚS será su última y verdadera<br />
alternativa.<br />
LA PARÁBOLA DEL BUEN PASTOR. (Lucas. XV, 3-7). Nada está tan cerca de JESÚS,<br />
<strong>com</strong>o <strong>la</strong> justicia y el justo. Por eso cualquiera esperaría ver a JESÚS en <strong>com</strong>pañía de los<br />
sacerdotes que servían en el templo y de los fariseos, tenidos oficialmente <strong>com</strong>o justos. Pero<br />
ocurre todo lo contrario: Él <strong>com</strong>e con los pecadores y los publicanos. Pre<strong>fe</strong>rentemente se ocupa<br />
de ellos y va en su <strong>com</strong>pañía. Esta conducta hal<strong>la</strong> su explicación en <strong>la</strong> parábo<strong>la</strong> del pastor que<br />
deja <strong>la</strong>s noventa y nueve ovejas para ir en busca de <strong>la</strong> que se le ha perdido, porque para JESÚS<br />
hay más alegría por uno que se convierte, que por noventa y nueve que no necesitan<br />
conversión.<br />
LA PARÁBOLA DE LA CIZAÑA. (Mateo.XIII,24-30). El que siembra <strong>la</strong> buena semil<strong>la</strong> es<br />
JESÚS. <strong>La</strong> buena semil<strong>la</strong> es su doctrina y el campo es el mundo. El trigo son los hijos del bien,<br />
los que actúan de acuerdo con JESÚS; <strong>la</strong> cizaña son los hijos del mal, los causantes de<br />
escándalos e iniquidades. En el mundo crecen juntos unos y otros, pero por sus obras siempre<br />
se conocen. Lo mismo que DIOS hace salir el sol para buenos y malos, para justos e injustos,<br />
así Él permite que el trigo y <strong>la</strong> cizaña vivan juntos en su mundo. JESÚS nos hace una<br />
simbología en su parábo<strong>la</strong> entre el premio, el Reino de su Padre para los hijos del bien, y el<br />
castigo, el horno ardiente para los hijos del mal. Pero este juicio hay que verlo desde <strong>la</strong> creencia<br />
en el DIOS de lo INEXPLICABLE.<br />
Pero en el mundo actual, ¿quiénes son los hijos del bien y quiénes los hijos del mal?. No todo<br />
el que dice tener en su poder <strong>la</strong> verdad, es el que practica el bien; <strong>la</strong> verdad para el hombre<br />
siempre es re<strong>la</strong>tiva, <strong>la</strong> Verdad absoluta sólo <strong>la</strong> conoce DIOS.<br />
Muchos que se consideran primeros, serán los últimos y los últimos , primeros. Algunos<br />
hombres y creencias van <strong>com</strong>o sepulcros b<strong>la</strong>nqueados, por fuera parecen trigo y por dentro son<br />
cizaña. El que se engrandece será humil<strong>la</strong>do y el que se humil<strong>la</strong>re será ensalzado.<br />
El que presume de <strong>la</strong> verdad y no respeta a su prójimo en sus creencias, es soberbio e injusto; y<br />
el que ve <strong>la</strong> paja en el ojo ajeno y no se da cuenta de <strong>la</strong> viga en el suyo, es un farsante, es un<br />
hijo del mal.<br />
¿Quiénes son el trigo y quiénes <strong>la</strong> cizaña?.<br />
LA PARÁBOLA DEL AMO Y LOS SIERVOS. (Lucas.XII, 36-48). <strong>La</strong> explicación <strong>la</strong> da<br />
JESÚS, dentro del contenido de <strong>la</strong> misma en los versículos enumerados.<br />
LA PARÁBOLA DE LAS VÍRGENES NECIAS Y DE LAS VÍRGENES PRUDENTES.<br />
(Mateo. XXV, 1-13). “Vigi<strong>la</strong>d, pues, porque no sabéis el día ni <strong>la</strong> hora”.Debemos estar<br />
preparados para que JESÚS nos acepte y nos reconozca. Tenemos que proveernos de lo<br />
<strong>La</strong> razón <strong>sobre</strong> <strong>la</strong> <strong>fe</strong> Joaquín Cózar Infante 70