La razón sobre la fe - Publicatuslibros.com

Recuerdo con mucho cariño la letra de una canción que por los años sesenta cantaba el padre
Alejandro:
Enamorado del mundo
un hombre mira hacia el mar,
y sus ojitos absortos
oyen las olas cantar.
Ronda de viento y espuma,
adivina que hay detrás.
Desde las altas montañas
bajan poemas de luz;
resuena el eco en los valles,
prensa de verde y azul.
Canta el amor en las piñas,
adivina que hay detrás.
Canto que canta la alondra
del uno al otro confín.
Yo no soy lo que tú buscas,
hay alguien detrás de mí.
Yo no soy lo que tú buscas,
hay alguien detrás de mí.
“Adivina que hay detrás”, “hay alguien detrás de mí”. Un canto a la maravilla de la naturaleza
en la que puso su mano DIOS al crear el mundo, dejándonos como herencia un paraíso para que
todos los hombres sin excepción disfrutáramos de él.
Es ese DIOS de lo inexplicable, el que tenemos que soñar que“está detrás de nosotros”; así de
sencillo y natural, porque nos dejó bastantes pruebas para tenerlo en cuenta.
¿Porqué tienen que hacerlo tan complicado?. Mira a tu alrededor y cuando contemples la
naturaleza, que poco a poco el hombre destruye, piensa que estás viendo a DIOS porque no
existe nadie humano que sea capaz de tal obra.
¿Porqué buscar a DIOS en lo inexplicable, en lo invisible?. Dejémoslo en esa dimensión y
supuesto que lo tenemos tan cerca, ¿por qué molestarlo en las alturas?.
A DIOS no lo descubre el filósofo, el teólogo, los eruditos de la religión; lo encuentra el
hombre de corazón llano, el sencillo, el humilde, el que busca la verdad clara y llana sin
tapujos.
Yo creo en ese DIOS que no conozco, el que nunca se ha manifestado al hombre, pero que es el
autor único de la Creación.
La razón sobre la fe Joaquín Cózar Infante 96