y mis amigos - Restaurante Sancho 2
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MI COCINA DE BODAS<br />
Unos apuntes de historia<br />
La celebración de banquetes de bodas es algo habitual en el restaurante <strong>Sancho</strong> 2, pero no por eso,<br />
cada uno de ellos deja de ser una gran ocasión para mostrar el esmero que la casa pone en cada evento.<br />
La historia de los banquetes es muy antigua, podríamos decir que es casi tan antigua como la edad<br />
de la humanidad, lo que es lógico porque todos los eventos se acaban festejando sentados con <strong>amigos</strong><br />
y familiares alrededor de una mesa colmada de las mejores viandas. Tenemos noticias gráficas de<br />
la celebración de banquetes en el antiguo Egipto y en Sumeria, más adelante en Grecia fueron tan importantes<br />
que Platón, uno de los filósofos más célebres de todos los tiempos, denominó “El banquete”<br />
a uno de sus diálogos. Los etruscos dejaron sus representaciones en las necrópolis de Tarquinia y<br />
entre los romanos alcanzaron el mayor grado de refinamiento. No hay que pensar que con la llegada<br />
de las invasiones bárbaras se acabaron los banquetes, todo lo contrario los pueblos nórdicos tenían<br />
por costumbre celebrar sus fiestas con una comida comunal al aire libre en la que los bardos entonaban<br />
sus cantos.<br />
En la Edad Media y en el Renacimiento se siguieron celebrando los acontecimientos familiares con grandes<br />
banquetes, entre las clases más pudientes, y con comidas festivas, aunque más modestas entre las<br />
clases populares. De los grandes festines celebrados en el período Barroco, dicen los cronistas que se<br />
acompañaban de grandes espectáculos de fuentes, luces y fuegos artificiales.<br />
Durante el siglo XIX las grandes celebraciones quedaron sólo para la alta burguesía, pero en siglo XX<br />
se popularizaron hasta nuestros días, en los que no importa el poder adquisitivo que se tenga para que<br />
todas las familias celebren las bodas con un magnífico banquete.<br />
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